Leandro Reitano se convirtió en el primer mendocino que se clasificó y luego finalizó en el Mundial XTerra. Además, le tocó hacer historia en la que los mismos organizadores denominaron la edición más exigente desde sus inicios.
El domingo se disputó el XTerra World Championship Maui Hawai.
Esta carrera consiste en nadar 1 500 m, pedalear en ruta de montaña 32 km y finalizar corriendo 10,5 km de trial running, y sólo se puede participar por clasificación previa en otras carreras, en su caso fue la prueba disputada en San Juan el último mes de marzo.
Leandro, o el "laucha" como le dicen los amigos, finalizó en 4h 45min en una prueba que se convirtió en épica por las adversas condiciones del escenario: de 641 participantes, concluyó en el puesto 231º de la general y en el 25º de su categoría por edad (25-29).
Luego de 3 días de lluvia, el mar se encontraba muy movido, con olas de hasta 3 metros que desafiaron cada brazada de los competidores, quienes, también debían salir a la playa y volver a ingresar para completar 2 vueltas de 750 m.
“Me concentré en salir del agua” sostiene Leandro, recordando cada brazada al aire y el esfuerzo por completar su instancia más vulnerable.
Luego, el segmento de ciclismo estuvo signado por el barro permanente que, además de caídas implicaba innumerables paradas para limpiar las cadenas y ruedas, todo para recorrer un desnivel de casi 1.000 m.
Para finalizar, los que conseguían completar el circuito, debían correr 10,5 km de trial running, “similares a subir el Cerro Arco” ilustra Reitano.
“Fue muy duro porque las piernas estaban cansadas y comenzaron los calambres” sostiene, “pero con mucha determinación, pude terminar y cruzar la meta”, agrega.
“El día después… fue tremendo... ¡necesité un cuerpo nuevo!”, sostiene ahora con una sonrisa el estudiante de veterinaria que hace poco menos de dos años no podía nadar 200 m continuados.
Una historia de superación y de continuo aprendizaje. Leandro no quiere ser ejemplo de nadie, solamente un testimonio de que toda meta se puede alcanzar si uno lo desea y lo sueña intensamente.
Por eso aprovecha para agradecer en primer lugar a su familia, principal sponsor de su viaje y también a su entrenador Raúl "Turco" Lemir, además del apoyo del equipo de triatlón del Club Mendoza de Regatas.