Cada tanto
Nicolás Repetto
se da un gusto que también tiene que ver con la televisión, pero que no lo involucra en la conducción ni en la producción de un programa. Y una vez más, oficiará de actor, aunque sólo sea por cinco capítulos.
Repetto acaba de firmar su contrato con Pol-ka para hacer una participación especial en “Farsantes” (de lunes a jueves, aquí a las 22.30 por Canal 7), donde hará un personaje íntimamente relacionado con el de Julio Chávez.
Nico será un ex juez que años atrás tuvo un romance con Guillermo Graziani, el brillante abogado que compone Julio Chávez.
El reencuentro no será fácil, puesto que, más allá de la historia entre ambos, Graziani no ha hecho pública su homosexualidad. Casado y con un hijo grande, el abogado mantiene la fachada ante todos los integrantes de su estudio, incluido su reciente socio, Pedro (Benjamín Vicuña), con quien entabló una corriente de confianza y contención mutua.
Otras actuaciones
Para Repetto éste no será un debut como actor. Eso sí, en general ha preferido hacerlo de la mano de Adrián Suar y su productora. Así desde que, en 1995, participó del primer capítulo de “Poliladron”, la serie que marcó el debut de Polka en la TV. Un poco más jugado, aunque breve, fue su rol en “Campeones” (1999), donde hizo de contrincante del mismísimo Guido Guevara (Osvaldo Laport), y contó con Suar como entrenador.
En cine, le tocó en suerte el rol del villano en “Mis días con Gloria”, un film de 2010 en el que trabajó junto a Isabel Sarli y Luis Luque.
Tras su paso más reciente por la televisión, como “mentor” en “El artista del año” (2012), junto a Nacha Guevara y con la conducción de Mariana Fabbiani, el creador de programas como “Fax”, “Nico” y “Sábado bus”, entre tantos éxitos, volverá a la pantalla chica.
Entre los factores que decidieron a Repetto, además de su amistad y confianza con Adrián Suar, y la posibilidad de compartir escenas con Julio Chávez, no fue menor el hecho de contar con la dirección de Jorge Bechara y Daniel Barone.
Repetto hará un papel difícil, pero se tiene fe. Y está cómodo, que no es poca cosa.
