Regatas volvió a gritar campeón

En tres finales memorables, emocionantes hasta el último punto, le ganó a UNCuyo y festejó a lo grande después de dos certámenes.

Regatas volvió a gritar campeón
Regatas volvió a gritar campeón

Mendoza de Regatas volvió al trono, ése que domina desde hace más de veinte años en vóleibol mendocino, en el que sólo  ha perdido algunos títulos frente a Tunuyán (2), General San Martín (1) y UNCuyo (1).

Es decir que la hegemonía del Parque sigue en pie, pero también quedó evidenciado el  importantísimo crecimiento de Tunuyán y UNCuyo.

Los Duendes y Los Manzanitas han movido la estantería a los del Lago en los últimos tiempos. Es que la transición del recambio para los del Parque ha sido muy paulatina.

Aunque bajo la dirección de Testa, esta vez más que buen vóley, Los Coquetos mostraron mucha garra y corazón. No se entregaron nunca y jugando mal parecían hacerlo bien.

Sin lugar a dudas, las tres finales vividas entre Regatas y UNCuyo en el Clausura 2017 A-1 son las mejores de los últimos 15 años.

Más allá del título, el gran protagonismo lo puso “U” y de la mano del Colo Leone, como en pocas ocasiones, UNCuyo fue un relojito en cada final.

Las emociones que se vivieron en los tres choques no tienen precedentes en las dos últimas décadas; no sólo por el nivel de juego sino por lo cerradas que fueron.

Lo valioso es que el vóley local está con aires nuevos de proyección, que involucra a UNCuyo, Tunuyán (que se prepara para  jugar la Liga A-2), Municipalidad de San Martín, Las Heras, que hace su apuesta y  San Martín de Porres, en inferiores.

Regatas vivió partidos con este tenor en las finales frente a General San Martín,  pero no tan intensas ni emotivas como las que como fueron las que jugó frente a los Duendes.

Tunuyán y UNCuyo  descubrieron que Regatas no es un equipo con misterios sino un plantel que trabaja, se entrena y busca la calidad de juego.

Por lo tanto se notó el gran trabajo  de la “U”, como así también el compromiso de sus jugadores con el historial que acompaña a la Verde.

Pudo ser para cualquiera. ¿Lo ganó Regatas? ¿Lo perdió Universidad? Un poco de cada cosa. Pero les  sobró grandeza a ambos.

El Colo Leone, con lágrimas en los ojos, luego de  que Eze Arregui “clavara” los dos puntos finales, se quedó con  lo que podría haber sido y no fue.

Lo tuvo en sus manos; primero como local y luego de visitante. El equipo mostró momentos brillantes, como también muchos laguneros. Justamente, en esos, es donde los jugadores de Regatas hacen doler cada pelotazo.

Luis Testa (acostumbrado a las emociones fuertes), volvió a gritar a un título local, como hacía tiempo lo no hacía. Uno de sus estandartes y compañeros de batallas, Mamona Miranda, apareció cuando realmente hizo falta, pese a la lesión en su mano izquierda.

En Regatas afloró la calidad de los pibes (Iturralde, Mocayar, Montarulli, Arregui),  que les va a tocar hacerse cargo de este legado, que Fernando Miranda, Leo Concina, Nico Bono y Mauricio Sánchez, le están dejando y que, por cierto, no es poco.

"Hoy hay un gran nivel de vóley"

Fernando “Mamona” Miranda  es uno de los grandes referentes del vóley local desde hace mucho tiempo, y terminó siendo el jugador desequilibrante en el último set de la final Regatas y UNCuyo.

“Estamos contentos porque necesitábamos el recambio. Los chicos están jugando muy bien y eso hay que agradecerlo al cuerpo técnico. Necesitan ser perseverantes, porque cuando uno es más joven no le da importancia. A mí en lo personal me duele perder una final o una semi. Ellos tienen que sentir lo mismo. No estábamos jugando bien  y pudimos salir adelante. Debo ser uno de los jugadores de Mendoza, que más finales ha disputado. Estoy contento porque Mendoza ha vuelto a tener un gran  nivel de vóley como hacía mucho tiempo que no se veía y hay que aprovecharlo”, destacó.

Hernán Banini, el mejor de la serie

El receptor punta de UNCuyo, sin dudas fue el mejor jugador de la cancha en los tres encuentros. Banini fue el más regular y una de las figuras de las finales del clásico: “Me parece que nos faltó madurez para definir los partidos, porque tuvimos las posibilidades de ganarlo. Hay que entender que jugamos con un gran equipo. Me gustaron las finales, fue un lindo espectáculo. Hace cinco años era impensable que nos fueran a ver. Lo bueno es que el nivel del vóley de Mendoza está creciendo mucho y nosotros como grupo”, dijo.

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