El club Mendoza de Regatas venció al septeto de la UN Cuyo, por 24-17 en el medio cilindro Universitario y se consagró campeón del torneo Apertura de primera damas.
En el mundo del balonmano, sus autoridades quieren volver a encauzar y ordenar el tema, por eso la final fue a un solo partido, y por ende ambas escuadras -la verde- comandada por la destacada Hebe Caballero- y la de CMR- orientada por Manuel Avallone- tenían mucho que ganar y mucho que perder.
Fue así que en este partido decisivo ambos equipos salieron a desarticular a su rival de turno y se dio un partido que difícilmente se olvidará y quedará en la retina de las casi 300 personas que fueron a ver un handbol de gran nivel y con excelentes exponentes.
Regatas contó con un poquito más de fortuna en el momento de las concreciones en el arco rival; las Azulgranas quebraron el cero por intermedio de Ana Stahringer y de ahí, las chicas de Manuel Avallone comenzaron a presionar y tuvieron en su arquera Florencia Marzal a unos de sus pilares, porque la golera neutralizó todo lo que le tiraron Natalia Vico y Compañía.
A las Duendecitas les costó, porque por momentos Regatas se defendió bien y los tiros caían en cualquier lugar. En los primeros minutos fueron muy efectivas Julieta Bauzá y Ana Stahringer, que desequilibraron cada vez que intentaron frente al arco de Daiana Becerra.
El entrenador de Regatas esperó estar en la recta final de los primeros 30 minutos para hacer ingresar a su figura principal: Macarena Sans, que no destiñó, sobre todo en el complemento. Al final todo terminó 12-7 a favor de Mendoza de Regatas, pero aún faltaba un tiempo, y sería el mejor del partido.
En el entretiempo, seguramente Hebe Caballero les dijo a sus dirigidas que había que estar más concentradas y precisas y la presión tenía que ser superior a la de los primeros 30. Las muchachas de Verde salieron con todo y el partido por momentos fue intenso y se transformó en un ida y vuelta.
Es más, la “U” estuvo muy cerca del empate, a dos puntos, pero en el cuarto de hora de juego, poco después del quinto gol de Stahringer, las locales no pudieron seguir con el ritmo arrollador y al final se inclinaron frente a Mendoza de Regatas, por 24-17, en una final de excelente y exquisito nivel técnico.