En una movida calcada a la que terminó con la suspensión del primer veto migratorio de Donald Trump, cinco estados -Nueva York, Washington, Oregón, Massachusetts y Minnesota- anunciaron ayer que se sumarán a Hawai en desafiar en los tribunales al nuevo decreto presidencial que prohibió el ingreso al país de refugiados y ciudadanos de seis países de mayoría musulmana.
"Es mi deber, es mi responsabilidad actuar y no nos vamos a dejar intimidar por amenazas del gobierno federal”, explicó ayer en una conferencia de prensa el fiscal general de Washington, Bob Ferguson, al anunciar que, otra vez, se enfrentará al Ejecutivo nacional en tribunales para frenar su política migratoria.
El estado de Washington junto con el de Minnesota habían sido, a finales de enero pasado, los impulsores de la ofensiva legal que terminó suspendiendo de manera definitiva el primer intento de Trump por vetar por decreto el ingreso de millones de musulmanes.
Ferguson adelantó que se presentará frente al juez del distrito oeste del Washington, James Robart, y contó que los estados de Oregón y Nueva York se sumarán a su denuncia, informó la agencia de noticias EFE.
Por su parte, el fiscal general de Nueva York, Eric T. Schneiderman, confirmó esto en un comunicado que él y agregó que la fiscal general de Minnesota, Lori Swanson, también se unirá a la demanda del fiscal de Washington.
“El último decreto del presidente Trump es una prohibición musulmana con otro nombre”, sentenció ayer Schneiderman al argumentar su decisión. Más tarde, la fiscal general de Massachusetts, Maura Healey, anunció que también se sumará a los estados que desafían en tribunales el nuevo veto migratorio de Trump, informó la cadena de noticias CNN.
Además, los estados de California, Connecticut, Delaware, Illinois, Iowa, Maine, Maryland, Nuevo Mexico, Pennsylvania, Rhode Island, Vermont y Virginia incluyeron por escrito su apoyo en la demanda que presentará el fiscal general de Washington.
El nuevo decreto de Trump mantiene el veto para ingresar al país para todos los refugiados por 120 días y establece una prohibición de tres meses para los ciudadanos de seis países de mayoría musulmana: Irán, Somalia, Sudán, Siria, Yemen y Libia. A diferencia del veto anterior, esta vez Trump exceptuó a Irak, país aliado de Washington después de la invasión estadounidense de 2003 y la posterior ocupación militar que duró hasta 2011.
El aluvión de anuncios de los estados detractores de la Casa Blanca fue iniciado en realidad ayer por el pequeño estado de Hawai, de donde es originario el ex presidente Barack Obama. Ayer el fiscal general de Hawai, Douglas Chin, explicó la decisión del estado y dijo que sus autoridades no podían quedarse calladas frente al veto migratorio de Trump debido a “la historia y cultura específica” del distrito.
Chin destacó que la isla depende mucho del turismo, un sector económico que sufrirá directamente por el veto migratorio, pero también recordó que el decreto fue firmado el mismo día que el país conmemoraba el 75 aniversario del decreto del entonces presidente Franklin Roosevelt que ordenó enviar a miles de japoneses-estadounidenses a campos de concentración durante la Segunda Guerra Mundial.
Ese decreto de 1942 fue una consecuencia directa del ataque japonés a la base de la Marina en Pearl Harbour y, por eso, Hawai fue uno de los lugares elegidos en Estados Unidos para levantar uno de los campos de concentración.
Ofrecen vender cemento para el muro con México
Nueva York. El gigante franco-suizo Lafarge Holcim dijo estar listo para vender cemento para proyectos de infraestructura en Estados Unidos y el muro que el presidente, Donald Trump, pretende levantar en la frontera con México para evitar la inmigración clandestina.
El proyecto, de un costo estimado de varias decenas de miles de millones de dólares, está en el centro de una crisis diplomática entre México y Washington y ha suscitado críticas en todo el mundo.
“Estamos listos para entregar materiales de construcción para todos los tipos de proyectos de infraestructura en Estados Unidos”, dijo Eric Olsen, presidente de la mega empresa, en una entrevista, al ser interrogado sobre la participación de la firma en el controvertido muro.
"Somos la primera cementera en Estados Unidos (...). Estamos aquí para apoyar la construcción y el desarrollo del país", se justificó. AFP
Restaurante demanda al presidente
¿Cómo competir con un restaurante en el hotel del presidente Donald Trump que está a unos pasos de la Casa Blanca? Dos empresarios gastronómicos alegan que es casi imposible, por lo que decidieron presentar una demanda.
Khalid Pitts y Diane Gross, dueños del restaurante Cork Wine Bar, sostienen que sufren competencia desleal bajo las leyes locales, por lo que entablaron la demanda contra Trump en lo personal y contra la empresa Trump Old Post LLC, que opera el hotel Trump International.
Los demandantes no piden compensación monetaria, sino que Trump remedie la competencia injusta: renunciando al cargo, separándose del hotel o cerrándolo mientras es presidente. AP