A falta de una semana para que se cumpla con el término previsto, el dato parece inmodificable: más allá de su calidad indiscutida, con más de 26,4 millones de quintales recogidos en todo el país la vendimia 2013 ya es la mayor de los últimos 5 años, detrás de los 27,9 millones de 2008. Y sin dudas impacta en el mercado.
Con un ciclo vegetativo extendido que obligó a esperar a avanzado el otoño por los malbec y cabernet de zonas frías, habrá que esperar para saber cómo impactarán los más de 10 millones de hectolitros de vino nuevo en las existencias y por ende en los precios del vino.
En pocos días, el INV debe monitorear los stocks elaborados, con 13,7° de tenor alcohólico promedio, y los preexistentes, a la vez que confirma el cumplimiento de la pauta de 30% a mosto, que aseguraría 180 mil toneladas.
Según su titular, Guillermo García, "en el caso de Mendoza con uno de los porcentajes más altos de los últimos años, con 23% y San Juan alcanzó el 50%. Es lo que se esperaba como meta. Significa 30 mil toneladas para el mercado interno y unas 150 mil que podemos exportar; en consecuencia creemos que los productores han entendido el mensaje".
Pero hay un costado menos positivo para productores de materia prima de alta gama. Es que muchos, con un pie en mayo aún esperan colocar su uva más selecta, lo que refuerza el hecho de que bodegas y viticultores hayan acordado mantener el mismo nivel de precios que cerraron la campaña 2012.
Para García, las cifras "permiten mantener el equilibrio pensando en la cosecha 2014, y en la medida en que todos actuemos de esta manera vamos a mantener sostenidos los precios. Obviamente el mercado define niveles de ventas y la promoción ayuda, por lo tanto haciendo un esfuerzo durante 2013 podemos tener éxito como lo hicimos en 2012".
Precios, acuerdos y metas
Más allá de los grandes formadores, los acuerdos contemplan que, en el mejor de los casos, no se pagará más, pero tampoco menos.
Con el Malbec como ejemplo, se negocia en torno a $ 8 a $ 9 por uva de un nivel inmejorable en Valle de Uco, $5 a $6 en Primera Zona y no mucho más de $ 4 por el de zona Este. No tan beneficioso es el panorama para otras variedades: el incremento en volumen está trasladándose en proporción inversa a las cotizaciones, como se observa en el Syrah (trepó de 91 millones de kilos en 2012 a 10,7,2 millones) , Bonarda y Cabernet de ciertas zonas; los compradores ofertan hasta 15% menos.
Mientras la finalización formal en San Juan y La Rioja debería ser éste fin de semana, para Mendoza será el domingo 5 de mayo, al igual que Catamarca y Salta. Aunque el punto de madurez lo estirará hasta mitad de mes, cerca del plazo para Neuquén y Río Negro.
Hasta que eso ocurra, no son pocas las bodegas que alquilaron vasijas, y finalmente acotaron su cuota de recepción.
"Hemos cumplido el plan establecido y en precios de la uva básica también", asegura José Luis Güerci, gerente de Grandes Volúmenes del grupo Peñaflor, sobre el piso "oficial"de $1,40 por kilo.
Para Güerci, el reto es colocar el producto. "Pese a la caída de granel, ahora hay que vender y exportar, buscando nuevos negocios para mejorar el precio promedio. Así como logramos pasar de 60 a 80 países en tres años".
Asia es el norte, y China el anhelo de todos. Allá donde La Rural, que éste año arrendó 4 millones de litros para su elaboración, lidera la franja de u$s 51 la caja.
"Somos la bodega argentina que más vende en China, que incluso superó a USA en nuestro ranking. Y en abril alcanzamos récord de ventas en el mercado interno", dice con satisfacción Mariano Di Paola, su director enológico.
Calidad, rendimiento y costos
A la espera del punto óptimo de unos 30 mil quintales restantes, de los cuales 6 de cada 10 son de Cabernet, Di Paola entiende que "es una gran cosecha. Una primavera húmeda ayudó mucho la brotación y la calidad es extraodinaria, pero sin dudas el ciclo se estiró mucho".
Sin embargo, aún con una cosecha hasta 25% superior, el menor rendimiento de los tachos parece irreversible. Por efecto del calor y la falta de agua, sólo en el Valle de Uco cayó en pocos años de 20,5 kilos a cerca de 17.
El enólogo de la bodega lujanina Renacer, Pablo Profili, coincide en que " hubo mucha calidad y cantidad. Pero además muy buena acidez, lo que resultó muy bueno, por ejemplo, teniendo en cuenta el incremento del costo del ácido tartárico".
Pero la firma de Drummond refleja la situación de otras tantas bodegas pequeñas. "En proporción, terminamos moliendo menos uva por una cuestión financiera", admite Profili.