La bicicleta representa la primera opción de movilidad en toda el área del sureste asiático y sobre todo en China, tanto en el medio urbano como en el rural.
A pesar de ser los poseedores del mayor parque móvil de bicicletas del mundo, la red de vías ciclistas en China no se distingue precisamente por estar bien planificada. Esto se debe principalmente a la creciente presencia de automóviles en dichas vías, gracias a que el gigante asiático está adquiriendo hábitos de consumo occidentales. Sin embargo, a pesar del aumento en la cantidad de autos en el país, la bicicleta sigue siendo la primera opción de transporte entre sus habitantes.
Existe un nuevo proyecto, liderado por la iniciativa Ecowan, para construir en las afueras de Shanghai el Chongming Bicycle Park, una ciudad dedicada al ciclismo. El objetivo del proyecto será articular un plan para coordinar la circulación en bicicleta desde el centro de la ciudad y su área metropolitana. Bike City es una idea presentada por JDS Architects, un joven y dinámico estudio de arquitectura y urbanismo cuya sede central se encuentra en Bruselas (Bélgica).
El proyecto consiste en una intervención urbanística a gran escala, donde la bicicleta sea la protagonista. Se compone de un Museo de bicicletas, un centro para visitantes y una sala de usos múltiples, creando un oasis urbano en las cercanías de Shanghai.
De acuerdo con su posición en el sitio y el programa que alberga, el Centro de Visitantes será visto como un punto de referencia visual, que actúa no sólo como un símbolo de Bike City, sino que funciona como acceso principal y centro de información. Ahí se ubicará la administración del parque y su estructura en forma de radio, estará forrada con placas solares cuya energía cubrirá las necesidades de abastecimiento energético de todas las instalaciones.
El parque tendrá una extensión de 40.000 metros cuadrados de superficie. Su pabellón espiral, albergara el Museo de Bicicletas, el cual será la atracción central del parque. Funcionará con una estructura de doble hélice. Las bicicletas podrán circular de arriba abajo y viceversa. Las rampas en espiral ofrecen excelentes vistas de los alrededores, mientras que el interior lleva a los visitantes por un recorrido por la evolución histórica de la bicicleta.
La sala polivalente, que tiene apariencia de una montaña, es un edificio de usos múltiples que se configura como una isla y que puede ser utilizada con diversos fines. Se pueden programar conferencias, concursos e incluso conciertos. Las laderas están a disposición de los ciclistas que quieran circular por ellas. La propuesta además acentúa la accesibilidad del espacio, ofreciendo un entorno completamente adaptado para el uso de la bicicleta, mediante una arquitectura versátil, manteniendo su propósito educativo y museológico.
El futuro parque es una manera increíble de fomentar y concientizar a la sociedad sobre el uso de la bicicleta, así como la presentación de los nuevos avances tecnológicos en materia de ciclismo.
Fuente: jdsa.eu