En el marco del Ciclo de Reconocimientos a artistas mendocinos que viene realizando el Gobierno de Mendoza, hoy será el turno de la bailarina y coreógrafa Codalinda Salinas, de vasta y rica trayectoria en la provincia y el país, fundamentalmente en el terreno de la danza española.
Nacida el 10 de junio de 1934 en Mendoza, Codalinda Salinas es una figura indiscutible del quehacer artístico local que inició sus estudios a muy temprana edad en la Academia Alhambra. Se recibió de Maestra en la Escuela Normal Superior Tomás Godoy Cruz, estudios que le darían la base para convertirse en lo que hoy nos refleja su imagen.
Sus primeros pasos los dio en las distintas presentaciones culturales y artísticas que se presentaban en Mendoza, convirtiéndose en una gran profesional abocada a la danza y el arte español. Desde 1957 y, en varias ocasiones, logró ser parte de la Fiesta Nacional de la Vendimia.
Su amor por la enseñanza se refleja en las clases públicas que encabezó desde mediados de los años ‘90, que fueron realizadas en diferentes salas provinciales con el apoyo del Gobierno de Mendoza.
Precursora por naturaleza, acercó la cultura española a través de la puesta de obras de gran renombre internacional como la “Misa flamenca”; “Bodas de sangre”, “El amor brujo”, “El sombrero de tres picos”, “El capricho español” y “La vida breve”, sólo por citar algunos ejemplos.
Como muestra de su gran valor como profesional y su labor solidaria podemos citar, también, sus innumerables presentaciones a beneficio con espectáculos de alta calidad en una carrera llena de logros y satisfacciones artísticas que le han valido, asimismo, otros numerosos premios y distinciones.
El reconocimiento a Codalinda Salinas se suma este año a los ya realizados a Ernesto Suárez en el ámbito del teatro, a Juan Giménez en la actividad de la ilustración y a Pocho Sosa en la música.
