El Sindicato de Alimentación se manifestó ayer frente a la delegación en San Martín de la Subsecretaría de Trabajo para reafirmar el enfrentamiento que desde hace meses mantiene con la empresa La Campagnola, propiedad del grupo Arcor, a la que acusa de "una reducción salvaje de la planta de personal a fuerza de retiros voluntarios y contratos que no se renuevan".
El gremio, que en los últimos meses ha mantenido una actitud combativa basada fundamentalmente en bloqueos a la planta de La Campagnola en San Martín, reclamó "por una reunión en la que se escuche al obrero, porque acá parece que el Estado se está lavando las manos en toda esta problemática", señaló Antonio Moyano, secretario gremial del sindicato.
Moyano aseguró que en los últimos doce meses "se perdieron más de un centenar de puestos de trabajo, tanto de contratados como de temporarios y la situación se recrudeció en los últimos dos meses. Esto significa que la empresa tiene un objetivo y ojalá nos equivoquemos, pero todo indica que se quieren llevar la planta de San Martín a otro destino; quieren dejar de producir durazno, que es la línea más importante que tiene la planta, y no vaya a ser que se la lleven a otra provincia".
El grupo de manifestantes cortó media calzada frente a la delegación de la subsecretaría de Trabajo y al no tener respuesta, el grupo marchó hasta la comuna, donde los dirigentes fueron recibidos por el intendente Jorge Giménez, quien les prometió su apoyo.
“Está preocupado por este problema y va a acompañarnos para que no se pierda una fuente más de trabajo en La Campagnola”, sostuvo Moyano, quien adelantó que el próximo miércoles habría una reunión en la sede de la subsecretaría de Trabajo.
"Nosotros no somos desestabilizadores, pero está claro que en medio de la incertidumbre y del miedo a que la empresa se vaya de San Martín, muchos compañeros agarran el retiro voluntario por migajas que ofrece la empresa y entonces, una persona que lleva 15 temporadas trabajando recibe menos de 200.000 pesos de indemnización.
Eso es un desocupado y un pobre más en el corto tiempo”, dijo el gremialista y aseguró que “en los últimos diez años, esta empresa pasó de tener 400 efectivos y más de un millar de temporarios a menos de un centenar de empleados en cada modalidad”.
La empresa dice que no cerrará la planta
Los Andes consultó en Córdoba a la empresa Arcor, que señaló que "La Campagnola no ha realizado despidos sin causa. Las desvinculaciones que se han producido por diversos motivos han sido por decisión o consentimiento expreso de cada trabajador".
Sobre el rumor que corre entre los empleados de que cerraría su planta de San Martín, la empresa lo negó: "No está planificado el cierre de esa planta".
Finalmente y respecto a, si como sostiene el gremio, La Campagnola ha realizado "una reducción sistemática de la planta", desde Arcor respondieron que "la industria frutihortícola no atraviesa, desde hace varios años, un buen momento, producto de los altos costos, el incremento de las importaciones y la caída generalizada del consumo.
En este contexto, la Campagnola sostuvo que "viene realizando un gran esfuerzo para sostener la operación de la planta, lo que ha implicado ciertas adaptaciones a lo largo del tiempo, incorporando nuevas líneas y productos a la planta de San Martín y trasladando líneas a otras plantas del grupo, siempre con el objetivo de mantener la competitividad y la sustentabilidad de las fábricas".
