Según documentos, esta propuesta de conmemoración tuvo su nacimiento en el Estado de Texas, EEUU en el año 1994. Hay una variedad de definiciones que expresan el concepto y objetivo del reciclaje.
El concepto del reciclado significa "la recuperación o aprovechamiento al que se someten materiales usados o desechos para que puedan ser nuevamente utilizables, en su uso original u otro".
Su objetivo, "la recolección selectiva (de basuras para su reciclaje), es una medida que beneficia el medio ambiente, además de generar un importante ahorro de materias primas".
Sintéticamente, "reciclar es el uso de aquella materia prima que se convirtió en productos de consumo, el cual volveremos a transformar en materia prima para culminar en ciclo, moliéndolos para posteriormente convertirlos en materiales y nuevos productos para consumo".
Según entendidos en la materia, aproximadamente el 92% de los desechos pueden ser reciclados de diferentes formas. Para que esto sea posible se requiere del aporte del ser humano, generador directo de los desechos. Si estos últimos se mezclan, se consideran recuperables (para reciclar) aproximadamente sólo un 30%. Al mezclar todos los desechos juntos se origina la basura, siendo esta uno de los problemas del siglo actual.
En la sociedad de la cual formamos parte, no se ha tomado conciencia de que debe separarse la basura de modo seguro y responsable. Personalmente considero que debiera ser esta nuestra obligación como ciudadanos, en pos de proteger y mejorar el medio ambiente que compartimos.
¿Cuáles son los beneficios? La pregunta, más allá de lo mencionado anteriormente, es contestable mediante ejemplos que permiten aproximarnos a la verdadera magnitud del problema y la forma de morigerar sus efectos nocivos.
Cartón y papel
. Cada tonelada de papel reciclado equivale a no talar aproximadamente 20 árboles, a no usar 1.500 litros de gasoil, 4.000 kilowatts de energía y 25.000 litros de agua. Los 20 árboles absorben (en vida) un total de 110 kilos de dióxido de carbono por año. No todo papel puede ser reciclado: sí el blanco o de color, diarios, revistas, folletos, cajas, entre otros (todos limpios y secos), pero no servilletas, pañuelos descartables, carbónicos, plastificados y metalizados, entre otros.
Vidrio
. Es reciclable en un 100% y no hay límites de veces que se puede reciclar. Se necesita apenas el 25% de la energía necesaria para hacer vidrio nuevo. A su vez, reduce la contaminación del aire en un 20% y la del agua en 50% en comparación con hacer una botella nueva. El vidrio de las botellas más modernas, tarda más de 4.000 años en desintegrarse. Se puede reciclar botellas, frascos, envases, vasos de vidrio entre otros (limpios y secos, sin restos de otros materiales) pero no lamparitas, vidrio laminado, vidrio roto, espejos y lozas, entre otros.
Plástico
. El desechado que va a ríos, lagunas y océanos mata alrededor de 1 millón de animales por año. Una botella de plástico puede tardar hasta 1.000 años en biodegradarse. Reciclar una botella de plástico, ahorra la misma cantidad de energía necesaria para hacer funcionar una bombilla de 60 watts por 3 horas. Además requiere apenas la mitad de energía necesaria para incinerarla. Pueden reciclarse tapitas de plástico, botellas de PET, envases de alimentos, sillas, bidones, pero no vasos, platos descartables, ni polietileno expandido (comercialmente tergopol).
Pilas recargables
. Son altamente contaminantes, ya que siempre contienen algún material peligroso en su interior como mercurio, zinc, cadmio o níquel (depende el tipo de pila). Si tiramos las pilas a la basura común, estas sustancias pueden ser absorbidas por la tierra, filtrándose hacia los mantos acuíferos y de éstos pasar directamente a los seres vivos, entrando con esto en la cadena alimenticia.
Estudios especializados indican que, por ejemplo, una micro pila de mercurio puede llegar a contaminar 600.000 litros de agua, por lo que cumplida su vida útil, es importante su reciclaje.
El proceso de reciclaje de pilas comienza separando el material peligroso de los demás materiales que contiene una pila. De esta manera se recicla un residuo peligroso y se evita que pueda contaminar el medio ambiente y perjudicar la salud de las personas. Una vez separado el material peligroso, las pilas son trituradas mecánicamente, obteniéndose residuo férrico y no férrico, papel, plástico y polvo de pila. Los cuatro primeros insumos se valorizan directamente. El polvo de pila sigue diferentes procesos para recuperar los metales que contiene. Por cada pila que se tira se puede llegar a contaminar la misma cantidad de agua que consumiremos en toda nuestra vida.
Electrónicos
. La basura electrónica es todo aquel dispositivo alimentado por energía eléctrica cuya vida útil finalizó. Los argentinos producen aproximadamente 2,5 kg de basura electrónica por año. Esta basura genera el 70% de la contaminación por metales pesados en los rellenos sanitarios y basurales.
Estos metales tóxicos pueden ser cadmio, mercurio, plomo, selenio o arsénico, los cuales son altamente contaminantes para el medio ambiente y la salud humana. Cuando se mezclan con el resto de la basura y se rompen, esos metales tóxicos se desprenden y pueden resultar mortales.El objetivo del reciclaje es separar los materiales no peligrosos como el plástico, vidrio o metal, de los metales pesados y baterías que contiene el aparato eléctrico.
Metales
. Son recursos no renovables extraídos de la corteza terrestre a través de la explotación minera (que tiene sus pros y sus contras en cuanto al medio ambiente). En el caso del aluminio puede reciclarse infinitas veces sin perder la calidad. Se necesita solo el 5% de la energía necesaria para hacer aluminio nuevo. Reciclar una lata ahorra energía equivalente a 3 horas de un televisor prendido. El aluminio tarda 500 años en biodegradarse.
La sostenibilidad desde la prevención
. Los residuos, entre ellos los de envases (como ejemplo), son un desafío ambiental, social y económico y deben ser considerados una fuente de recursos. Por ello se busca fomentar que la prevención de su generación y gestión ambiental sean prioritarios en cualquier estrategia empresarial y política medioambiental. Esto se consigue a través de las medidas de prevención, que incluyen no sólo la optimización del diseño y materiales, sino también la formación e información de consumidores y ciudadanos, para conseguir reducir al máximo el uso de los recursos.
Reflexión final
. No por reiterado, lamentablemente sigue siendo triste realidad la no toma de conciencia de que los recursos naturales son finitos. Por ello se menciona la necesidad de que la explotación de los recursos se dé en el marco de la sostenibilidad.
El objetivo de lo sostenible es preservar la naturaleza de una excesiva presión, para no agotar su capacidad de uso, lo que significa planificar la reposición del recurso utilizado (en cantidad y calidad), a fin de mantener y aumentar el mismo para la presente y futura generación de habitantes. Es responsabilidad del Estado (a escala nacional, provincial y municipal) la gestión sostenible de los residuos, maximizando su reducción mediante el reciclado y optimizando el uso de los recursos. Respetando la naturaleza, respetamos nuestra vida.
(Información y datos procesados para este artículo de: Donde reciclo.org.ar, Agencia Europea de Medio Ambiente, Ente de Calidad, Evaluación Ambiental y Medio Natural del Magrama-España, Gestión de residuos/Amigos de la Tierra, Grupo Internacional de Gestión Sostenible de Recursos-ONU- Pnuma (Berlín, 24/4/13).
Las opiniones vertidas en este espacio no necesariamente coinciden con la línea editorial de diario Los Andes.