Los habitantes de Samoa, Nueva Zelanda y otras islas de la Línea del Pacífico donde se marca el cambio de día, fueron hoy los primeros en celebrar la llegada del Año Nuevo, que en Hawaii será recién cuando en Argentina sea la mañana de hoy.
En Apia, capital de Samoa, la llegada de 2013 fue celebrada con una agradable temperatura de 25 grados.
En tanto, en Wellington y en Auckland el nuevo año llegó a las 8 de ayer de Argentina y fue recibido con un festival de fuegos artificiales.
En las horas siguientes se sumaron al festejo su vecina Australia, Japón, China y otros países asiáticos.
Más tarde el edificio Burj Dubai, que con sus 828 metros es el más alto del mundo y se alza en la capital de Emiratos Arabes Unidos, se encendió con un deslumbrante despliegue de luces para recibir el Año Nuevo, en una ceremonia transmitida en directo desde Dubai.
Miles de personas presenciaron el magnífico espectáculo con sus cámaras y celulares en alto para registrar la celebración qur tuvo com ocentro la torre llamada también Califa, en la avenida Sheik Zayed Road.
Los fuegos de artificio rodeaban la torre en movimientos ascendentes y descendentes, mientras que desde la cima del edificio y de otros cercanos partían luces que iluminaban la noche en la capital de los Emiratos Arabes, acompañadas por los gritos de asimbro y júbilo del público.
En todo el mundo se planearon celebraciones que culminaron cuando casi 1millón de personas colmaron la plaza Times Square de la ciudad de Nueva York para atestiguar el descenso de la bola de cristales de Waterford que marca la llegada del 2013.
El festejo mundial comenzó en Sydney, Australia, donde se lanzaron siete toneladas de juegos pirotécnicos desde techos y barcazas, muchos de ellos en forma de cascada desde el Puente del Puerto, una extravagancia que costó 6,9 millones de dólares y que según los organizadores es la más grande del mundo.
En Atenas, la pirotecnia iluminó la antigua Acrópolis para recibir el que se proyecta será el sexto año de recesión del país. En su mensaje de fin de año, el primer ministro griego Antonis Samaras declaró 2013 un "año de esperanza''.
En la Basílica de San Pedro, el papa Benedicto XVI dijo que pese a la muerte e injusticia en el mundo, la bondad prevalece.
Yakarta organizó una multitudinaria fiesta callejera en consonancia con la pujante economía de Indonesia.
Hong Kong hizo la tradicional exhibición de juegos pirotécnicos con un costo de 1,6 millones de dólares, y según los organizadores, fue la más grande que haya tenido lugar en la ciudad del sur de China.
A un año de la asunción del líder Kim Jong Un, los norcoreanos dieron la bienvenida al Año Nuevo, descrito como "Juche 102'' en su calendario tradicional. ``Juche'' significa autosuficiencia.
En Nueva Delhi, la festividad se vio opacada por la muerte el sábado de una joven víctima de violación. En Filipinas muchos se estaban recuperando de la devastación que causó in tifón reciente.
En Alemania, la canciller Angela Merkel dijo en su mensaje de Año Nuevo que su país deberá estar preparado para futuras dificultades económicas. Nicosia, capital de Chipre, canceló su celebración por la crisis económica.
Peruanos se hacen "limpieza" contra la mala suerte
Miles de peruanos acudieron ayer a los mercados y a la "Feria de los Deseos" de Lima en busca de una prenda amarilla, para realizarse una "limpieza" contra la mala suerte y para que los yatiris (adivinos) les lean el futuro antes del comienzo del nuevo año.
Unos 50 yatiris o kallahuayas, bolivianos y peruanos, realizan desde el 20 de diciembre al 17 de enero la "limpieza" en la "Feria de los Deseos" que todos los años se instala en el Campo de Marte de Lima. Allí también "leen el futuro" a los miles de peruanos que se acercan.
Para la limpieza contra la mala suerte "se le pasa (a quien lo pide) huevo de avestruz, luego flores amarillas, el armadillo y sables de acero. Luego se le reza con incienso para que reciba el nuevo año con buena vibra", dijo el yatiri boliviano César, quien se hace llamar "sacerdote andino".
Ludovica Zapana, una yatiri de Puno (sudeste de Perú), recibe cada día entre 50 a 100 creyentes a los que lee el futuro con hojas de coca. Cobra unos tres dólares por consulta.
"Todos los años vienen a buscarme porque saben que soy acertada", aseguró.
La mayoría de los adivinos utilizan la hoja de coca, técnica ancestral para leer el pasado y el futuro de los clientes, pero hay otros que lo hacen con plomo, maíz, partículas de imán, nuez, cerveza y palma de la mano, dijo Lidia Cortez, organizadora de la feria.