La Secretaría de Seguridad estuvo en llamas con las autoridades de Boca luego de confirmarse el levantamiento del derecho de admisión para Mauro Martín, en primera instancia, y de los hermanos Rafael y Fernando Di Zeo, en el marco de una medida más reciente. Por esa razón, y mientras se acusaba a los dirigentes xeneizes de colaborar poco y nada en la lucha contra los barrabravas, las fuerzas nacionales pusieron en duda la disputa del Superclásico que comenzará desde las 18.15 en La Bombonera.
Aunque rápidamente el club emitió una defensa pública haciendo alusión a que ninguno de ellos podrá estar en el estadio el Superclásico válido por el torneo doméstico porque infringen los requisitos que establecieron en la comisión directiva en la diagramación de la venta de localidades, para los expertos en la materia de prevención hizo ruido la decisión de la institución de restituir los carnets de socio a los simpatizantes caracterizados.
Entonces, la sentencia de Sergio Berni y compañía fue firme: “Si Boca confirma que saca el derecho de admisión, el partido no se juega”. Y aunque les dejó el 'consejo' de llamar a la Policía Metropolitana para organizar un operativo que estará conformado por 1.200 uniformados, también se empezó a barajar la posibilidad de desarrollar el encuentro a puertas cerradas. Un auténtico papelón en la previa de uno de los partidos de mayor atención a nivel mundial. Finalmente, hubo acuerdo: la medida de anular la prohibición de ir a la cancha se notificará y tomará forma tras este fin de semana.
Según deslizaron por lo bajo los miembros del organismo de seguridad, el problema no solamente radicaba en la asistencia de Martín y Di Zeo a la cancha de Boca, sino también en la nutrida tropa de hombres que planeaba acompañarlos en el regreso presencial a los espectáculos deportivos. Pero esta vez lo mirarán por televisión, o al menos eso prometieron desde la directiva de la entidad de La Ribera, y también los propios ex líderes de la “12”.
La sólida postura de la Seguridad puso contra la espada y la pared a Boca, que debió tomar una decisión inmediata para impedir la postergación del derby. Sin embargo, nadie sabe qué pasará para el enfrentamiento copero del 14 de mayo, cuando se supone que los barrabravas ya no sufrirán el derecho de admisión. Cabe destacar que, entresemana, la Sala VII de la Cámara de Apelaciones apartó al juez Manuel de Campos de las causas de investigación sobre los movimientos de la barrabrava xeneize. Horas más tarde, la Justicia hizo lugar al pedido de Martín y el club le restituyó el carnet que tenía retenido desde agosto de 2012. Y momentos después, la gota que rebasó el vaso con la aparición de Di Zeo en la oficina de Atención al Socio para recuperar su credencial.