Los combatientes islamistas del norte de Malí poseen sobre todo armas livianas de infantería, procedentes de los arsenales libios o compradas a traficantes de armas con los ingresos que obtienen del tráfico y de los rescates pagados por rehenes.
"Son principalmente armas livianas de infantería procedentes de países del Este, a menudo montadas en vehículos todo terreno que transportan una decena de combatientes", indicó Eric Denecé, director del Centro Francés de Investigación sobre Inteligencia. El experto rehusó hablar de "armas pesadas", dado que éstas, según la clasificación de los armamentos, empiezan a partir del calibre 20 mm.
Según él, los yihadistas tienen fusiles de asalto Kalashnikov, fusiles de precisión, ametralladoras livianas de 7,62 mm y pesadas de 12,7 y de 14,45 mm. Estas pueden ser montadas en camionetas, al igual que las ametralladores soviéticas bitubo antiaéreas de 14,5 mm o de 23 mm, que tienen hasta 2.500 metros de alcance.
Los combatientes poseen también probablemente algunos cañones de 105 mm y algunos misiles tierra-aire SAM7.
Un exoficial de un servicio de inteligencia francés agregó que los islamistas poseen también sin duda algunos misiles Milan (misiles antitanque de fabricación francesa vendidos por Francia a las fuerzas libias de Kadafi).