Libros electrónicos, diccionarios en línea: las nuevas tecnologías influyen en el español y su difusión a través de la industria editorial, cuyo estado analizará el VI Congreso Internacional de la Lengua Española, de hoy al 23 de octubre en Panamá.
Inscrito en las conmemoraciones del quinto centenario del descubrimiento del Pacífico, el congreso -organizado por la Real Academia Española, la Asociación de Academias de la Lengua Española y el Instituto Cervantes- tiene por lema "El español en el libro: del Atlántico al mar del Sur".
"Nos concentramos en el libro y en esas aplicaciones cercanas a él, por ejemplo el libro electrónico que tiene elementos de las nuevas tecnologías y elementos antiguos del libro tradicional", explicó José Manuel Blecua, director de la RAE y presidente de la Asociación que agrupa a las 22 academias del español.
Durante cuatro días se abordarán cuestiones como "los problemas que hoy tiene el libro desde el punto de vista jurídico, con los derechos digitales, la propiedad intelectual, todos estos elementos que hoy son tan palpitantes y que no existían hace 20 años", afirmó.
Desde el primer Congreso, celebrado en 1997 en Zacatecas (México), donde Gabriel García Márquez lanzó su polémico llamado a "jubilar" la ortografía, cambiaron también "las posibilidades de trabajo con la lengua, con todo lo que las aplicaciones informáticas han traído a la investigación lingüística", agrega, señalando "el acceso por ejemplo a las grandes bases de datos" en línea.
En esta edición, presidida por el príncipe Felipe de España y el presidente panameño Ricardo Martinelli, la inauguración correrá a cargo del escritor hispano-peruano Mario Vargas Llosa, el nicaragüense Sergio Ramírez y el panameño Juan David Morgan.
El congreso, que por primera vez tendrá una edición virtual en internet, será también la ocasión para presentar una Ortografía Elemental coincidiendo con el interés de la anfitriona, la ministra de Educación de Panamá, Lucy Molinar, por darle un carácter educativo.
La RAE presentará asimismo "dos proyectos íntimamente relacionados con la cuestión de internet", explica Blecua.
El primero consiste en el nuevo portal de la Academia, donde además del diccionario de la lengua -que ya registra 42 millones de visitas al mes- se podrán consultar las obras fundamentales publicadas desde su fundación hace 300 años, alguna de la cuales dejará de tener edición en papel.
A este proyecto se agrega la primera fase de una base de datos, bautizada Corpus del Español del Siglo XXI (Corpes), con 160 millones de palabras de momento, procedentes en un 70% de textos americanos y en un 7,5% de material surgido de internet.
La red y sus actores, entre ellos los blogueros, serán también abordados aunque su influencia sea aún demasiado reciente, según Blecua, para sentirse en el idioma.
"Los estados de lengua no cambian con tanta rapidez, pero lo que sí pueden aparecer son algunos elementos léxicos o sintácticos" nuevos, explica.
Con un 90% de los más de 400 millones de hispanohablantes, América Latina juega un papel clave en la vitalidad del idioma y de su industria editorial, afirma asimismo el director de la RAE, señalando los "millones de libros publicados por todas las editoriales del continente".
Especialmente en un momento en que "las ventas han descendido preocupantemente en España", afirma. "Es un fenómeno que va unido a la crisis económica por una parte y por otra parte a fenómenos más complejos como la piratería de los libros electrónicos", asegura.
Organizados cada 3 años, el último congreso tuvo lugar en 2007 en Cartagena de Indias (Colombia) ya que el de 2010, previsto en Valparaíso, tuvo que cancelarse debido al violento terremoto del 27 de febrero.