El radicalismo pone objeciones a la deuda que pide el Gobierno

La verdadera puja por el presupuesto 2014 aún no comienza. Apenas alguna pirotecnia verbal, pero nada más. Por lo pronto, está clara la necesidad del oficialismo de sentar al radicalismo en la mesa y conversar. Es que los bloques del Frente para la Victoria y sus aliados en ambas cámaras podrían sacar la pauta de gastos para el año que viene, pero sin los radicales no habrá autorización para el endeudamiento. Para eso, hacen falta dos tercios de los votos en ambas cámaras.

Más allá de la pirotecnia, nunca llega la sangre al río. La UCR obliga a hacer ajustes y luego de apretar el cuello termina dándole al Gobierno el endeudamiento. Ya lo hizo así el año pasado.
Esa necesidad del oficialismo de obtener dos tercios es lo que centra la puja por el presupuesto con la Unión Cívica Radical. Los votos del PD no suman para los dos tercios que prescribe la Constitución Provincial para aprobar empréstitos.

De hecho, el Partido Demócrata lo sabe y empieza a jugar con eso: ayer los técnicos de la fuerza hicieron pública su idea de votar en contra de la pauta de gastos oficial. Habrá que ver si el PD en pleno toma la decisión y así trata de diferenciarse del radicalismo.

El radicalismo apunta que el Gobierno obtiene endeudamiento caro. Según los cálculos del secretario de Hacienda de Godoy Cruz, Martín Kerchner, de los 1.700 millones de pesos que la provincia deberá pagar en concepto de amortización de deuda durante 2014, 1.100 millones de pesos fueron obtenidos durante las administraciones de Celso Jaque y Francisco Pérez. Kerchner dice que el 70% es capital (730 millones de pesos) y el 30% es intereses (365 millones de pesos).

El radicalismo dice que Gobierno provincial pide para este año varias autorizaciones para tomar créditos: 748 millones de pesos para solicitar al BID-BIRF, 1.700 millones para pagar deudas anteriores y 400 millones para el Fondo de Transformación y Crecimiento. A esto se suma una autorización para emitir letras por el 3% del total del cálculo de recursos, es decir, alrededor de 900 millones de pesos. En total pues, las autorizaciones suman más de 3.700 millones de pesos.

Cabe recordar que las letras son una "deuda" que debe cancelarse durante el ejercicio, es decir, no pasar al año posterior. Es por eso que el oficialismo no habla de endeudamiento.
El ministro de Hacienda, Marcelo Costa, dice que "en el presupuesto ponemos que necesitamos financiamiento por 2.453 millones. De ese monto, 750 ya lo tenemos autorizado por otras leyes. Sólo pedimos autorización por 1.700 millones que son para pagar deuda, obra pública y bienes de capital, no para gastos corrientes como dice la UCR".

Para entender las diferencias entre oficialismo y oposición en lo que hace a deuda y gastos, hay que mirar un dato que viene del pasado: la ejecución presupuestaria del ítem "Trabajos públicos". En la página web de Hacienda se dice que, hasta el mes de octubre, se habían gastado 467 millones de pesos. Lo que votó la Legislatura eran 1.686 millones de pesos. Se gastó el 27% de lo que se iba a gastar en obras en un año electoral.

Costa dice que si bien no se van a gastar todo lo autorizado, si será más que en 2012, cuando la ejecución en obras llegó al 45% del total autorizado. "Vamos a gastar un 25% más, con viviendas", jura Costa con la intención de deshacer el fantasma de la subejecución.
Según el ministro, el gasto del IPV no está incluido en los 467 millones que figuran en la planilla  oficial. Cabe recordar que en 2012 se autorizaron para Trabajos Públicos 930 millones de pesos y se gastaron algo más de 400 millones.

La oposición habla de subejecución y se sospecha que ese dinero terminó en sueldos del personal del Estado, sobre todo teniendo en cuenta que los artículos 9 y 10 del presupuesto 2014 permiten el movimiento de partidas.

En la mirada radical, mil millones ahorrados de la partida de obras, le permitieron al Gobierno enfrentar el incremento de los salarios durante este año. Y denuncian que el año próximo sucederá otro tanto, sobre todo cuando la pauta de personal prevista para 2014 es apenas un 10% mayor que la del año pasado.

El senador Sergio Moralejo indica que ese 10% "se lo devora sólo la antigüedad estatal". La historia dice que los aumentos obtenidos por los gremios estatales nunca son menores al 25%.
La cuenta radical es que el 25% más de los casi 12 mil millones gastados este año, son 3.000 millones más, o sea que para 2014 el personal se llevaría 15.000 millones. Si el Gobierno estimó 13 mil millones, faltan dos mil millones. La mitad saldría de la partida de Trabajos Públicos.

El presupuesto se elaboró suponiendo que el crecimiento de la provincia llegaría al 6%. Desde la Fundación Ideal (que preside la senadora nacional Laura Montero) se recuerda que América Latina crecería un 3%. Otro hecho puesto en duda por la UCR es suponer el precio del dólar a $6,50, lo que implica una devaluación del 5%. En la Fundación se indica que el dólar crece frente al peso un 27% interanual.