Racing buscaba refrendar una clara levantada en sus últimos juegos, y para ello debía enfrentar en Santa Fe al difícil Unión de Madelón. El juego fue entretenido, frenético y ambos complementaron errores defensivos al peligro que generaron en el área rival. Se mataron a goles y en ese festival fue Racing el que se llevó lo mejor: 6-3.
Cuando parecían estar estudiándose, los dirigidos por Sava metieron una contra letal que abrió el marcador. Pereyra subió por derecha, tocó para Martínez que se la dio rápido a Milito y este habilitó a Noir, quien la clavó abajo a la derecha de Fernández. No hubo tiempo para disfrutar de la ventaja y a los 13’ llegó el empate. Pittón pateó ante la salida de Saja, que la dejó corta tras un rechazo con los puños.
Tan marcada era el ida y vuelta, que la lotería le tocó a la Acadé a los 21’. Martínez aguantó en la raya lateral, tocó para el medio y, tras un par de toques, Noir asistió de cabeza a Díaz que definió por abajo a la salida del arquero. El juego no daba respiro. A los 26’ volvió a festejar el Tate. Riaño peleó una pelota dividida y la pelota tomó un efecto raro que descolocó a Saja: 2-2. El último tanto de ese PT llegó a los 31’ a través de Milito. Pereyra centró un tiro libre de zurda que no pudieron despejar bien y la pelota le quedó al capitán para que defina sin marca.
La segunda etapa comenzó más lenta. Racing parecía cuidar la ventaja y Unión no generaba peligro. Esa tendencia duró 10’ y el juego revivió con otro empate transitorio del local. A los 12’ Martínez bajó una pelota en el punto del penal, pero en vez de abrir para un compañero que entraba por derecha, el colombiano disparó de media vuelta. La pelota pegó en un rival y, por ese rebote largo, llegó la contra y el 3-3 de Villar.
Y como se dijo: el partido cayó en el mismo frenesí que en la primera etapa y 3’ después Racing pasó de nuevo al frente. Martínez disparó apareado con un defensor, la pelota dio en el palo y Milito sacudió desde afuera. A los 22’ Noir tuvo una clara para definirlo, pero no pudo. Por esa jugada, Emanuel Brítez se fue expulsado, y Federico Beligoy hizo la seña de que fue por hablarle de más al juez de línea (pidió posición adelantada).
A partir de allí, Unión fue a buscarlo y tuvo sus chances de empate, pero las mejores fueron de la Academia. En el final, Martínez tuvo su premio y puso el quinto. Pero al juego le quedaba una última emoción. También en el descuento, Licha López marcó el suyo.