El secuestro y posterior asesinato de Xiomara Naomi Méndez Morales (15) generó conmoción en Buenos Aires. Su familia pagó un rescate de $ 30.000 y hasta los captores le exigieron drogas. Según la Policía, la chica fue tomada cautiva por un conocido de su madre cuando salió del colegio en el barrio porteño de Flores.
Por estas horas, la hipótesis principal apunta a una venganza o ajuste de cuentas, posiblemente vinculado al narcotráfico, ya que los propios tíos de la víctima confirmaron que la persona que manejaba el Fiat Duna rojo era un remisero cercano a la familia. Al parecer, la adolescente se subió al vehículo desconociendo las intenciones perversas de los sujetos.
En su perfil de Facebook, la adolescente, hincha de San Lorenzo y nacida el 16 de julio de 2003, había posteado una foto, en agosto pasado, con el mensaje: "Poco a poco la vida te enseña por quién debes luchar. Y a quién renunciar".
Xiomara también era fanática de Ozuna, el cantante puertorriqueño de reggaetón, y de la salsa peruana, informó Clarín.
Los malvivientes fueron detenidos por la Policía tras una ardua persecución que culminó en Ituzaingó. Al revisar el auto, los efectivos hallaron el cadáver de la joven de 15 años. Estaba maniatada con un cinturón y tenía la boca tapada con cinta de embalar.
Según Infobae, la menor es hija de una pareja de peruanos que tienen un puesto de venta de ropa en una galería sobre la avenida Corrientes y que se dedican a la compraventa de autos usados.