Dos mujeres fueron detenidas en el hospital de Florencio Varela acusadas de haber intentado envenenar a un preso que estaba internado y al agente del Servicio Penitenciario Bonaerense que lo custodiaba, cuando les dieron para tomar una gaseosa sabor pomelo mezclada con pesticida para hormigas.
Fuentes policiales y penitenciarias informaron hoy que tanto el preso, identificado como Emilio Darío Alé, como el penitenciario Federico Ferreira (28), convulsionaron luego de beber el veneno y continuaban esta tarde internados en el sector de terapia intensiva del mencionado hospital Zonal Mi Pueblo.
Una de las imputadas, María Betania Pérez Pilo (32), es la concubina del detenido Alé y la otra, María Alejandra Pérez (40), es una amiga de ella.
La principal hipótesis es que Pérez Pilo trató de asesinar a su pareja, primero en la visita que más temprano le habían hecho junto a su amiga en el penal, donde el interno se descompuso, y que más tarde fue a rematarlo con la gaseosa envenenada al hospital, donde el penitenciario terminó intoxicado por accidente al tomar un sorbo de la bebida.
Fuentes de la investigación aseguraron que todo comenzó ayer cuando las dos mujeres concurrieron a la Unidad Penal 23 de Florencio Varela para visitar a Alé, con quien permanecieron conversando unas horas hasta que en cierto momento el detenido se descompensó y pidió asistencia médica.
Alé fue trasladado al hospital Mi Pueblo, también de Florencio Varela, donde fue asistido por los médicos y quedó internado con la custodia de un penitenciario, explicaron los investigadores.
Siempre según las fuentes, cerca de las 17 llegaron a ese centro asistencial las mismas dos mujeres que habían concurrido al penal, una de las cuales se identificó como su pareja, y pidieron ver al detenido.
Las ahora imputadas llevaron dos botellas de gaseosas de 600 mililitros que les entregaron a los penitenciarios y les dijeron específicamente que la marca "Sprite" era para ellos y que la "Paso de los Toros" pomelo era para el internado.
Los investigadores explicaron que el propio Alé, después de tomar unos tragos de la gaseosa pomelo, le convidó de la misma botella al agente Ferreira que lo custodiaba en el cuarto.
“A los cinco minutos de haber tomado la gaseosa, el preso y el penitenciario comenzaron a convulsionar y se desvanecieron, por lo que fueron trasladados de urgencia a la sala de terapia intensiva”, donde continuaban esta tarde internados, dijo una fuente de la investigación.
Ambas mujeres fueron demoradas por personal policial en el propio hospital y ante la consulta judicial correspondiente, quedaron detenidas acusadas de “doble tentativa de homicidio”.
Los investigadores creen que Alé, quien está preso hace 8 años por "asociación ilícita y robo agravado" en una causa relacionada a piratería del asfalto, era el objetivo del plan criminal de las imputadas y que el agente penitenciario fue una víctima casual ya que fue convidado a tomar un poco de la gaseosa por el propio recluso al que él custodiaba.
En el hospital, la policía incautó y preservó para análisis de laboratorio la botella de “Paso de los Toros” pomelo que a simple vista presentaba en el fondo restos de alguna sustancia ajena a la propia bebida.
La causa comenzó a ser investigada por la fiscal en turno, Vanesa Maiola, de la Unidad Funcional de Instrucción 6 de Florencio Varela, pero al tratarse las víctimas de un preso y un penitenciario, luego fue derivada a su colega de la 9, Marcelo Sellier, quien investiga delitos en el ámbito carcelario.
Los fiscales ordenaron allanar anoche los domicilios particulares de ambas acusadas, y en la vivienda de Pérez Pilo, en la ciudad de La Plata, los investigadores encontraron oculto un frasco de "Hor-tal", un poderoso pesticida mata hormigas, así como también un frasco con líquido para frenos y otra sustancia aceitosa que no pudo ser identificada.