El director y productor estadounidense Quentin Tarantino ahora es noticia, no por una nueva película, sino porque el sábado 1 de diciembre su sala cinematográfica New Beverly Cinema, en la ciudad de Los Ángeles, dedicada a proyectar filmes en 35 milímetros.
Inaugurada originalmente en 1929 en el Boulevard Beverly, la sala fue comprada por Tarantino en 2007 y cerrada por remodelaciones en enero de este año.
El programa de reapertura contempla una matiné con Batman vuelve (1992) de Tim Burton, seguido de un programa doble con Butch Cassidy (1969) y Los primeros golpes de Butch Cassidy y Sundance Kid (1979), más una función de medianoche de Rebeldes y confundidos (1993) de Richard Linklater.
La sala cuenta con trescientas butacas y es uno de los sitios que el director frecuentó como espectador. Pero cuando compró el lugar, el director de "Kill Bill" decidió mantener el clásico formato de doble programa con proyecciones en 35 milímetros.
En 2014 señaló que buscaba transformar al New Beverly Cinema en un templo para filmes que se proyecten en celuloide, muchos de los cuales pertenecen a su colección personal.
