Policiales
Detuvieron a la mujer que atacó a una jubilada en un club de golf de Pinamar: investigan tentativa de homicidio
hace 1 hora
Su mujer lo denunció por violencia de género y él incendió su casa con dos bebés y otros cinco menores adentro. El hecho ocurrió en Río Grande, Tierra del Fuego. De milagro, el incidente no dejó víctimas, informó Clarín.
En la vivienda, que quedó por completo destruida, también se encontraba un joven de 19 años, que junto al de 17, son hijos de otra relación de la mujer. Los chicos resultaron con algunas quemaduras leves e intoxicación por el humo inhalado, pero están fuera de peligro.
El hecho ocurrió el pasado 8 de julio, aunque trascendió recién en las últimas horas. El agresor está detenido.
El juez de Instrucción Penal en feria, Daniel Cesari Hernández, resolvió a principios de esta semana el procesamiento y la prisión preventiva de Gerardo Saúl Núñez, por considerarlo autor del delito de incendio con peligro de muerte para alguna persona.
El magistrado entiende que Núñez, intencionalmente, inició el fuego en la vivienda del pasaje Avellaneda 2582, en la que había dos bebes de cinco meses, cinco menores (de 2, 6, 12, 14 y 17 años de edad) y un joven de 19 años. De acuerdo a lo que se desprende del procesamiento, se pudo comprobar que Nuñez inicio tres focos de incendio dentro de la casa y pretendió darse a la fuga.
En el lugar del incendio, el personal policial encontró a un hombre sumamente exaltado, que fue demorado, en razón de que esa mañana había protagonizado un incidente con su pareja, que residía en la vivienda siniestrada.
En el mismo momento en que se producía el fuego, María Roldán, pareja de Núñez, estaba radicando una denuncia contra él en una comisaría, acusándolo de violencia de género. Según la mujer, en horas de la mañana habían tenido una discusión que terminó con ella quemada en uno de sus brazos luego de que su atacante la empujara contra un horno pizzero.
Cabe indicar que Gerardo Saúl Núñez es una persona que ya tiene antecedentes de violencia contra sus parejas, por los que se le iniciaron causas, aunque nunca fue privado de la libertad. Esto le posibilitó volver a atacar y casi provocar una verdadera tragedia, más allá de provocar daños físicos a los menores que se vieron afectados por la inhalación de humo.
