El gobierno de Alberto Fernández anunció hoy a través del Boletín Oficial un DNU que autoriza que las retenciones para la exportación de granos, que estaba en 4 pesos por dólar durante la gestión de Macri, ahora pasarán a valor porcentual del 9% mientras que los impuestos a la soja pasará del 18 al 27%.
Esta nueva medida por parte del flamante presidente hizo que las distintas agrupaciones que representan al sector agrario salieran a repudiar la suba de retenciones para su sector y sostuvieron que se trata de un impuesto que ya se intentó hacer antes y que fracasó.
Matías De Velazco, el titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) fue uno de los primeros que cruzó la nueva medida de Fernández. "Es una mala noticia porque ya se probó que la suba de retenciones no tiene un final feliz", expresó en una entrevista que le realizó TN.
De Velazco además, tildó a la medida de "manotazo de ahogado" y aseguró: "Nos dijeron que íbamos a conversar y me enteré de esto por el DNU".
Otro de los que salió a criticar la medida fue Daniel Pelegrina, el presidente de la Sociedad Rural Argentina. "Son medidas perjudiciales, el impacto para el productor será muy grande", dijo en una entrevista realizada por Radio Mitre. Si bien dijo que "no hay que intranquilizar al sector", el dirigente se quejó de que "aún no se conoce la letra chica del decreto". Además agregó: "Esto se trata de una medida aislada donde siempre el campo es el principal perjudicado".
Eduardo Buzzi, extitular de la Federación Agraria, habló hoy en una entrevista con Radio Con Vos y aseguró que aunque es "una mala medida" comparó este esquema de retenciones con el que impuso Néstor Kirchner en 2007. "Si hay una mesa de negociación y hay políticas activas no es tan fuerte el 'lonjazo'", dijo ofreciendo una postura diferente a sus colegas.
Buzzi además recordó cuando ocurrió la crisis con la resolución 125 durante el kirchnerismo: "En ese caso eran confiscatorias, esto si mantiene un dólar competitivo está en un nivel de Néstor Kirchner 2007, siempre y cuando no haya sorpresas el lunes es algo digerible".