Arranca un nuevo año electoral y la volatilidad cambiaria tiende a incrementarse. El factor clave es que un ciclo de mayor volatilidad cambiaria generaría una posición menos favorable para el Gobierno, porque que una disparada del dólar puede impactar en los precios e incrementar el malhumor de la sociedad, de cara a las elecciones presidenciales. Si bien el factor electoral será el punto más importante del año, no es este el único elemento a vigilar en 2019. Este escenario de riesgo cambiario se enmarca en el medio de un proceso de normalización monetaria, luego de un 2018 volátil para el tipo de cambio y el cual ha alcanzado ciertos logros de corto plazo.
Riesgos
Si bien en las últimas semanas se ha logrado disminuir fuertemente la volatilidad cambiaria y detener la crisis monetaria al menos de corto plazo, aún existen ciertos riesgos que amenazan la estabilidad actual del tipo de cambio. “Estos riesgos están atados principalmente a factores de incertidumbre en torno a las próximas elecciones presidenciales y a un escenario financiero global más desafiante”, remarcaron los analistas de Banco Mariva.
Atesoramiento de dólares
ara los analistas de Banco Mariva, una de las variables clave para monitorear es el atesoramiento de dólares. “A pesar de la mejora en los últimos meses, identificamos que la demanda de dólares por ahorro tiende a acelerarse en años electorales, como se evidenció antes de las elecciones de 2017.
Generación de dólares por producción agrícola
Otro factor importante que resaltan desde Banco Mariva está relacionado a cuántos dólares genuinos provendrán del sector agrícola.
“Esperamos que la producción agrícola alcance un nuevo máximo en 2019, con un total de 117.5 millones de toneladas de soja, maíz y trigo, alcanzando así un valor total de la cosecha de u$s 28.5 millones, es decir, un 38% de crecimiento respecto de 2018. Sin embargo, destacamos que las condiciones climáticas adversas, los precios más bajos o que los productores decidan vender menos producción (como observado en 2015 y 2017) podría llevar a un menor suministro de dólares y, en consecuencia, a una mayor presión hacia la depreciación del peso”, comentaron.
Depósitos en el sistema bancario y encuestas electorales adversas
Mediante la implementación de una estrategia de restringir el acceso a las Lebac primero y lanzar nuevos productos por el otro, el BCRA inició un proceso de desarme de la bola de nieve de Lebac. En dicho proceso, la corrida se complicó aún más y las tasas de interés en pesos mostraron un fuerte repunte hasta alcanzar niveles de 70%. Este proceso de suba de tasas y control del tipo de cambio, mediante el nuevo programa monetario, hizo que sea nuevamente atractivo tener posiciones en pesos, generando un incremento de los depósitos en pesos. Esta dinámica resulta un riesgo importante para el año que comienza debido al factor electoral y la dolarización de portafolios.
Alejandro Kowalczuk, Head Portfolio Manager de Argenfunds sostuvo que es cierto que se eliminó el problema Lebac, pero hay que seguir de cerca la evolución sobre la solidez patrimonial del BCRA, es decir reservas versus base monetaria ampliada (base monetaria más pasivos remunerados: pases y Leliq).
“Si bien hay un compromiso de no crecimiento de la base monetaria, M3 (base monetaria más depósitos en cuenta incluyendo plazos fijos) crece al 36.3% interanual. Las corridas de 2018 fueron contra desarme de posiciones de Lebac, pero hoy el proceso de dolarización de portafolios necesariamente debería iniciar con la salida de depósitos a plazo, lo cual conlleva riesgos no menores”.
Aun así, el Head Portfolio Manager de Argenfunds no ve riesgos significativos, pero si riesgos latentes asociados al panorama político. “Los ratios de cobertura de la base monetaria ampliada y de M3 se mantienen en valores más que aceptables, 114,96% y 71,92% respectivamente, comparados con los números alcanzados el día previo a la salida del cepo cambiario, 25% y 15% respectivamente, aunque aquí hay que tener en cuenta la mejora generada por los dólares que ingresaron vía FMI y swap con China”.
En este sentido, si las encuestas permiten vislumbrar un escenario de continuidad, no creo que haya una salida de depósitos significativa, siempre y cuando se mantengan las tasas de interés reales proyectadas en niveles atractivos. Caso contrario, los inversores pueden asociar el regreso del gobierno anterior con el restablecimiento de las políticas de control de cambio antes implementadas, por lo que el proceso de dolarización de cartera contra salida de depósitos va a ser mayor.
"Es importante aclarar que este escenario no pone en juego la solidez del sistema financiero, sólo afectaría en nivel alcanzado por el tipo de cambio", sostuvo el Head Portfolio Manager de Argenfunds.
Factor electoral y desequilibrios macroeconómicos
Naturalmente el factor electoral no deja de ser un tema clave en términos de la estabilidad del tipo de cambio y no puede dejar de estar en la lista de los factores que impactarán en el dólar.
Para el Banco Mariva, la volatilidad cambiaria se verá profundamente afectada por una amplia variedad de factores aunque creen que el ciclo político local será el motor clave detrás de la evolución del tipo de cambio el próximo año.
“Mirando hacia adelante, nuestro escenario base sigue suponiendo que la próxima administración continuará llevando a cabo las políticas necesarias para hacer frente a los desequilibrios que nuestra economía local sigue enfrentando”, sostuvieron.