Alrededor de veinte peritos comenzaron a trabajar esta mañana en la autopsia del cuerpo hallado el martes en el río Chubut para determinar si se trata del joven Santiago Maldonado, que desapareció el 1 de agosto en Esquel, y establecer las causas que provocaron el fallecimiento.
El juez federal Gustavo Lleral les pidió a los científicos y a los abogados de las partes "respeto por la familia" del joven artesano y también "cautela y paciencia" porque la autopsia del cuerpo "va a llevar mucho tiempo", según contó una de las personas que participaron del encuentro.
En esa reunión, que postergó el comienzo de la autopsia prevista para las 9.30 y donde no estuvieron presentes familiares de Maldonado, el magistrado les anticipó que durante la necropsia "se van a utilizar dos cámaras, una fija y una móvil, que registrarán en tiempo real" y les pidió dejar "a resguardo" los celulares para evitar filtración de imágenes.
Alejandro Inchaurregui, perito de parte de la familia del joven artesano, aseguró al ingresar a la Morgue Judicial, que "puede no haber resultados en el día de la fecha" respecto de la autopsia sobre el cuerpo trasladado ayer desde Esquel.
"La expectativa es la misma que en cualquiera de estas circunstancias. Uno no sabe con qué se va a encontrar, no puede aventurar, no se puede hacer futurología", declaró Inchaurregui y pidió a los periodistas manejar la cuestión "con responsabilidad para con la sociedad".
Por su parte, Liliana Alaniz, abogada querellante en representación de la Asociación de Profesionales en Lucha (APEL), remarcó que "no sabemos si hoy se podrá saber la identidad" del cadáver, pero remarcó que "queremos que se agoten todos los recursos para que sea indubitable (la determinación), podemos esperar para tener la certeza de quién es la persona y saber qué es lo que ocurrió".
Tanto Inchaurregui como Alaniz confirmaron que en la autopsia participarán alrededor de 20 peritos, de todas las partes interviniente en la causa Maldonado -incluida del gendarme imputado Emmanuel Echazú- y dos veedores (uno por la familia del joven y otro por el CELS).
La abogada de la asociación de derechos humanos confirmó que se aplicará el "Protocolo de Minnesota" para determinar si la víctima fue objeto de una ejecución y si hubo torturas.