El presidente ruso, Vladimir Putin, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, celebraron en Rusia su primera cumbre, en la que analizaron la posibilidad de avanzar en la desnuclearización del país asiático y mostraron coincidencias en medio de un deterioro de la relación entre Estados Unidos y Corea del Norte.
La cumbre se realizó en una universidad de Vladivostok, la ciudad rusa ubicada a orillas del océano Pacífico, donde, según los participantes, hubo un ambiente bastante distendido y los dos líderes se mostraron relajados.
"Hemos hablado, por supuesto, de la situación en la península coreana. Intercambiamos opiniones sobre lo que hay que hacer para que la situación tenga perspectivas de mejora", dijo Putin, al punto que agregó que veía "posible" la desnuclearización de la península coreana.
Imágenes y videos difundidos por la prensa rusa mostraron a los mandatarios sonriendo y dándose elogios, en contraste con el clima de tensión que sobrevoló la cumbre celebrada este año entre Kim y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Hanói.
El encuentro de febrero pasado en la capital de Vietnam -el segundo entre Trump y Kim tras la cumbre del año pasado en Singapur- concluyó de manera abrupta por la falta de acuerdo entre ambos países sobre los pasos a seguir para continuar el desarme nuclear norcoreano.
Ambiente “constructivo”
Las conversaciones en Vladivostok se iniciaron con una primera reunión a solas entre ambos jefes de Estado, que continuó después con un encuentro ampliado a las delegaciones oficiales.
Entre ambos encuentros, Putin dijo a periodistas que las reuniones transcurrieron en un ambiente "constructivo, profesional y amistoso" y que en ellas también se abordaron la historia de las relaciones entre ambos países y los planes de desarrollo de la cooperación bilateral.
Kim, en el poder desde 2011, aseguró por su parte que había llegado a Vladivostok para tratar "las vías para el arreglo pacífico" del conflicto nuclear en la península coreana, que, en su opinión, despierta un "interés prioritario" en el mundo, informó la agencia de noticias EFE.
Putin recordó que fue el padre del actual líder del país comunista, Kim Jong-il -con el que se había reunido en tres ocasiones (2000, 2001 y 2002)- el que impulsó la firma de un tratado de amistad con Rusia.
Gran parte del diálogo entre los dos se centró en el proceso de desnuclearización, pero el interés dentro y fuera de Rusia también estaba puesto en escrutar cada gesto entre ambos para ver el nivel de afinidad que podía existir.
Una vez finalizado el encuentro, ante la consulta de los periodistas Putin consideró que "es posible" continuar con las negociaciones para el desarme nuclear del país asiático.
"Corea del Norte necesita garantías de seguridad, de defensa de su soberanía" dijo el presidente ruso en una conferencia de prensa en la que llamó a todos los países interesados a dar "los primeros pasos" para aumentar la confianza.
"Me dio la impresión de que el líder norcoreano defiende ese punto de vista. Sólo necesita garantías de seguridad. Eso es todo. ¿Cuáles pueden ser esas garantías sino jurídicas?", apuntó y anticipó que hablará "con los estadounidenses y nuestros amigos chinos" sobre los resultados del encuentro.
Putin ha asegurado en varias ocasiones que tras el derrocamiento y ajusticiamiento de los líderes iraquí y libio, Sadam Husein y Muamar el Gadafi, respectivamente, los Kim concluyeron que las armas nucleares eran la mejor garantía de la supervivencia del reino ermitaño ante un intento de violento cambio de régimen por parte de EEUU.
Por ello, insistió en la necesidad de "confianza" y de renunciar a "la ley del más fuerte" a la hora de resolver crisis internacionales como la coreana, que tiene al mundo en un vilo desde el fin de la Guerra Fría
En tren blindado, de Pionyang a Vladivostok
Como hiciera su padre en 2011, Kim llegó a territorio ruso a bordo de su tren blindado. Vladivostok se encuentra a apenas 200 kilómetros de la frontera norcoreana. El tren hizo recordar al revolucionario Lev Trotski, que durante los cinco años de guerra civil también recorrió el país en un tren. El padre de Kim Kim nació en Siberia, según archivos soviéticos desclasificados, en medio de la guerra contra los invasores japoneses.