Mi alma es menos mía y más
[la del caballo
con mataduras en el lomo,
[vi mis propios huesos
fosforeciendo en medio de la noche,
ayer lechuzas de plumas blancas
[revolotearon
sobre la salina primero y luego
sobre un riacho que se ha formado
y en ese movimiento
las he visto acorralar la muerte.
* * *
Hay días en los que me hundo
[en el agua y no sé
si por influjo de la luna o por
[un simple movimiento del sol
puedo deslizarme sobre la tierra
[tan sinuosamente
como una serpiente con aros
[de color azul intenso
desde la cola a la boca,
[pero ese cuerpo de serpiente
pálido y embozado no soy yo,
quisiera poder aclarar cerca de
[tus oídos
algunas de estas cosas, me has dicho
que no es posible por ahora,
ya que las nuevas ocupaciones
[te llevan todo el día
y también que tu vida es mejor,
[más sólida.
No me hagas caso, simplemente
[podrías decirme
si es verdad que las escamas
[de mi cuero
siguen brillando a pesar de haber
[sido
arrancadas una por una, y que aún así
el cuerpo está contento con
[esta pequeña vida.
* * *
Te contaría que los pájaros
[que se habían ido, han vuelto,
y que ahora tengo el pico róseo,
[plumas timoneras y me dedico
por completo a la flor y
[el fruto del naranjo.
Hay algo que me ha dejado
[confundida:
el desconsuelo se ha vuelto mayor,
una cobardía que recién
[ahora conozco.
No he sabido ni podido entender
cómo es la partida de la luz cada día
[tan distinta, cómo es que
[el mar descarga tempestades,
no había pensado antes en la sal
[blanca y cristalina
que en el agua se disuelve y en
[cómo el sol
brilla más sobre la sal que
[sobre el verde. Perro,
reptil, ave de presa, todo me sorprende
la fragilidad, las alas que se despliegan
hay flores amarillas que vegetan en
[la cabeza
y en otras partes del cuerpo.