Maipú lo ganó de puro coraje. Se puso el overol y cuando parecía que el partido se iba en un empate sin mucho brillo, en el tiro del final apareció el tímido Álvaro Veliez, con un zurdazo extraordinario hizo delirar a los Botelleros.
No especuló y tal vez esa fue la base del éxito, que con muy poco se quedó con mucho. Los tres puntos y una actitud, que le permitirá a los dirigidos por Sperdutti viajar ilusionados a la revancha frente a Desamparados que se jugará en San Juan, el fin de semana.
Con un jugador menos, tras la expulsión de Daher a los 35 minutos de la primera etapa, hizo pensar que El Cruzado no arriesgaría tanto. Y es verdad no arriesgó, pero tampoco renunció nunca al gol o ganar el partido. Desamparado se mostró timorato, pese a tener un jugador de más y en el primer tiempo, tal vez mostró lo mejor que pasó por los pies de Lastra o Fondacaro.
La salida de Lastra y el ingreso de Miranda fue un alivio para el local. El mentado delantero nunca fue una amenaza para el arco de Tello y además crecieron las figuras de Martínez Smith (que jugó al filo) y Villarino, que controlaron muy bien el fondo. Es que el dueño de casa no especulaba ni afuera ni adentro de la cancha, pese a de a ratos daba sus ventajas, en la mitad de la cancha, es que la ausencia de Daher no fue fácil de suplir, pese a la doble función de Figueredo.
Esta situación de rato hacía que los sanjuaninos tuviesen la pelota, pero no controlaban el partido. Desde afuera el cuerpo técnico apostaba a no especular. Y desde adentro, el ritmo lo imponían Sergio Sánchez y la extraordinario recuperación de Aguirre, un jugador imprescindible en el lateral derecho. Contagiaban.
Estaba claro que la oportunidad y la ilusión era lo último que iba a entregar Maipú. Había probado desde afuera de área con un par de pelotazos, el pibe Veliez y Aguirre. Perelman se mostró muy atento y en otras Décima fue un reloj; llegó siempre a tiempo.
El partido se iba con la tarde maipucina con un intrascendente empate, el que sólo le servía a los sanjuaninos, quienes nunca supieron aprovechar ni generar los espacios. Ni en lo colectivo ni mucho menos en lo individual.
Un despeje defensivo de Maipú le quedó a Viscarra, quien habilitó con un pelotazo cruzado a Veliez. El pibe quebró la cintura, miró el arco e hizo estallar el Sperdutti...
Carlos Sperdutti?: ¿quién nos quita la ilusión ahora?
El entrenador del Cruzado se mostró conforme y felicitó a sus jugadores por la entrega y el triunfo y luego dijo al respecto: "apareció el amor propio, pero también el fútbol en este partido de Maipú, que es para destacarlo. Pero sin dudas, que esto es el primer tiempo en estos partidos, donde logramos el gol al último. Pero nosotros nunca renunciamos a buscar el gol, incluso se pudo ver en los mismos cambios que hicimos, porque queríamos ganar el partido. Son cosas que a veces sale y otras veces no", dijo el DT. Respecto a la revancha que se jugará la próxima semana destacó: "Vamos a luchar con las armas que tenemos, hoy Maipú jugó bien sin cosas raras y ¿ quien nos quita la ilusión ahora?. Sabemos que Desamparados es un equipo difícil y más en su cancha, pero bueno nosotros nos llevamos tres puntos y con un jugador menos", sostuvo.
