Desde hace varios meses, los habitantes de Puente del Inca -quienes además trabajan en los puestos ubicados en el lugar- vienen reclamando por mejoras en sus condiciones de vida y de trabajo.
Luego de que hace poco más de 2 semanas mantuvieran una reunión con funcionarios municipales buscando reactivar la zona y mejorar la infraestructura de los puestos de venta, ahora el reclamo se traslada a la atención médica: los más de 120 vecinos del lugar denuncian que el centro de salud está vaciado y que solamente hay un médico los martes y jueves.
Desde el Ministerio de Salud, en tanto, confirmaron que el profesional está yendo dos veces a la semana al lugar, aunque indicaron que lo está haciendo con una ambulancia y equipamiento que antes no tenía. Además, destacaron que se necesitarán "varios meses" para poder normalizar la situación, teniendo en cuenta el estado de abandono -en lo que a infraestructura se refiere- del edificio donde funciona el centro de salud. Y que ya están trabajando en el tema.
Pese a estas aclaraciones, los vecinos son por demás pesimistas y desconfiados de estas promesas. "Informalmente, cuando hemos reclamado por esta y otras situaciones, nos responden con tono de burla que vayamos a los medios a pedir que nos den mejoras. Les molesta que nos estemos quejando", indicó uno de los vecinos del lugar.
Dos veces por semana
Según indicó Santiago Fernández -vecino y comerciante de Puente del Inca-, hace más de 3 meses comenzaron las irregularidades en lo que se refiere al la atención sanitaria.
"Sacaron el médico que teníamos. Ahora viene dos veces por semana, porque está en el Hospital de Uspallata. Y no tenemos ni medicamentos acá", denunció. En la misma sintonía, Carolina Díaz se refirió con una ironía al panorama.
"Tenés que enfermarte martes o jueves, y de 15 a 19, que es el momento en que hay médico. Y rogar que no te pase nada los lunes, miércoles, viernes y fines de semana", destacó. No obstante, agregaron que el médico hace todo lo que puede por atenderlos y cuidarlos, y que no es un problema específico con cómo hace su trabajo, sino con los horarios que le han asignado.
"Vaciaron el centro de salud que teníamos, por lo que hay que ir a Uspallata ahora. Y ahí te dan atención primaria y te derivan a alguno de Mendoza", agregó otro de los vecinos del lugar.
El malestar de los vecinos también responde a que, al tratarse de un sitio turístico, consideran fundamental que haya al menos un médico todos los días. "Vienen más de 700 turistas al día que bajan a ver el puente. Nosotros mismos hemos tenido que atender a personas mayores que han tenido problemas de presión cuando no está el doctor", sostuvo Carolina, quien destacó que Gendarmería ha enviado una nota a la Provincia manifestando la necesidad de que haya un centro de salud activo en el lugar y que ni así han tenido éxito.
"Hace 6 años murió un vecino porque tuvo un problema y cuando quisieron atenderlo, el desfibrilador del centro de salud no tenía batería. Cuando hay que trasladar a alguien a Uspallata (90 kilómetros) lo hacemos en una camioneta de Gendarmería o alguien tiene que llevarlo en su auto", contó la mujer.
Explicación oficial
El director general de la Región Metropolitana Norte del Ministerio de Salud, Raúl Salvatore, explicó que están trabajando en la "recuperación histórica del lugar, tras muchos años de crecimiento en la zona que no fueron acompañados por obras". El funcionario destacó que las condiciones edilicias del centro de salud no son las mejores, teniendo en cuenta que falta calefacción y sistema informático, entre otras cosas.
"Estamos en vías de mejorar la infraestructura, que tiene problemas de larga data. Por ejemplo, allí la calefacción es a leña y se precisa de todo un operativo para subirla. Muchas veces es difícil revisar a un niño, por ejemplo, con el frío que hace. Por eso es que directamente se lo traslada y atiende en Uspallata. Lo mismo que con las emergencias", destacó Salvatore.
Respecto al médico destinado a Puente del Inca, el funcionario destacó que tras el cambio de gestión se revisaron todas las adscripciones y derivaciones, y que en muchas de ellas se dio marcha atrás. "El médico estaba nombrado en el hospital de Uspallata, por lo que regresó a su puesto de trabajo. No obstante, dos veces a la semana sube con una ambulancia y enfermeros para revisar y atender a la gente de ese lugar. En realidad siempre estuvo dos días por semana, pero lo que se ha hecho ahora es fijar y ordenar sus horarios", indicó el director de la Región Norte.
"No hay soluciones mágicas y tampoco son fáciles. Obviamente poder normalizar la situación nos va a llevar tiempo y estamos buscando hacer acuerdos con otros ministerios y áreas para mejorar la infraestructura. Obviamente esto nos va a llevar tiempo, pero las más de 120 personas que viven en Puente del Inca tienen médico, cuentan con movilidad y están dentro de un sistema. No están a la deriva".
Sólo con ver el establecimiento donde funciona el centro de salud de Puente del Inca alcanza para entender que necesita obras de mantenimiento urgente. "En los últimos 10 años, Uspallata y la zona de Alta Montaña crecieron 140% en población. Pero la infraestructura no creció así. Ni hablar de cuando se cierra el paso y la cantidad de gente aumenta", destacó.
A mediados de mes, funcionarios de la Municipalidad de Las Heras se reunieron con los vecinos en la hostería del lugar -que también está en desuso y con problemas de mantenimiento- para comenzar a trabajar en el ordenamiento del sitio. Allí los lugareños manifestaron su preocupación porque desde hace años se los amenaza con sacarlos -juntos con sus puestos- del predio que antecede el avistamiento del monumento.
Desde la comuna destacaron que antes de tomar cualquiera decisión, harán estudios y nada se decidirá de forma arbitraria. Desde el área de Turismo de Las Heras, prometieron trabajar en un plan de recuperación del lugar para que no sea simplemente un lugar de paso.
Los vecinos señalaron que están esperando un operativo de limpieza prometido y colocación de luminarias.