"Este miércoles es un día de clases, los docentes estarán autorizados a tener en los recreos algún momento de reflexión pero sin pérdida de días de clases", afirmó María Inés Abrile de Vollmer, la directora general de Escuelas de un gobierno que invita a los padres a enviar hoy a sus hijos a los colegios.
"Le pedimos a los padres que sean solidarios con los trabajadores de la educación porque marchamos no sólo para los salarios sino también por toda la escuela pública. Por eso pedimos que no envíen a los chicos a la escuela para poder discutir (en asamblea) las acciones a seguir", la contradijo el secretario general del SUTE, Javier Guevara.
En medio de este tironeo y luego de un inicio de clases postergado dos días por el paro docente, los padres de 400 mil alumnos deberán definir si envían o no a sus niños a las escuelas pues en la mayoría de las cuales habrá asambleas de personal. En las privadas, en tanto, sí habrá clases.
"Dos días de paro son más que suficientes y recomendamos que (hoy) los padres envíen a los chicos", machaca Vollmer. "Vamos a usar las unidades y la jornada de trabajo para el análisis. No es una jornada de paro porque los trabajadores asistirán a sus lugares de trabajo, pero realizarán asambleas al estilo de los trabajadores de la salud", dispara Guevara, anticipando otro día sin clases, aunque no se trate de un paro "oficial".
La propuesta
La confusión -que en la práctica aporta un tercer día al plan de lucha del SUTE- se produce precisamente durante una jornada decisiva. Es que el Ejecutivo entregará hoy a las 10 una "propuesta salarial superadora". Ésta irá más allá del 23% y oscilará en torno a los dos puntos adicionales respecto de la oferta anterior del 21.3%. Así se desprende de la segunda oferta que el Gobierno le presentó ayer a los gremios de la Salud (22.47%) y que ATE y Ampros rechazaron (ver aparte). La apertura de nuevas paritarias sin que se haya producido el cierre de las anteriores ha comenzado a complicar al Gobierno. Es que la negativa a una oferta en una negociación "posterior" (caso Salud) obliga a subir el ofrecimiento en la negociación salarial "anterior" que aún no está cerrada (caso SUTE).
El ofrecimiento que se presentará hoy al SUTE jamás podrá ser menor al 22,47 ofrecido (y rechazado) ayer por la Salud y -por el contrario- deberá alejarse por arriba de ese porcentaje. Esto significa que el ofrecimiento superará el 23% aunque se desconoce cuánto más. Y si la oferta de ayer a la Salud (22,47%) era la consecuencia acumulativa de un 9% en enero, un 7% en mayo y un 7% en setiembre, la de hoy del SUTE mejorará esa progresión muy posiblemente en el porcentaje de enero o en el de mayo. Al parecer, el Gobierno seguirá insistiendo en el aumento escalonado en tres veces.
En principio, la iniciativa que el Gobierno presentará hoy da respuesta a uno de los principales reclamos del gremio: que el aumento de este año supere en monto efectivo al del año anterior: 800 pesos para el docente con diez años de antigüedad y 600 para el celador de una antigüedad similar.
Se espera que la propuesta que hoy recibirá el SUTE sea analizada mañana por los dieciocho plenarios departamentales y el viernes por el plenario provincial que se llevará a cabo en Maipú. Y también que sea evaluada mañana por la asamblea de delegados de los docentes privados de Sadop.
El panorama docente se endureció en Mendoza, la única provincia de la región con un conflicto de este tipo. En San Juan UDAP rechazó el ofrecimiento del 23% de aumento del gobierno de José Luis Gioja, pero aún así continúa negociando sin llevar a cabo medidas de fuerza. En tanto en San Luis y en La Rioja las clases se desarrollan normalmente porque los porcentajes de aumento de 24 y 26% de los gobernadores Beder Herrera y Claudio Poggi fueron aceptados por los gremios. Un caso particular es el de Córdoba, donde el gobernador De la Sota debió enfrentar dos días de paro "solidario" a pesar de haber acordado 26% de aumento.
En los últimos dos días once provincias sufrieron paros docentes que afectaron a más de cinco millones de alumnos de Buenos Aires, Catamarca, Córdoba, Corrientes, Jujuy, La Pampa, Mendoza, Santa Cruz y Tucumán, Entre Ríos y Neuquén. La Unión Trabajadores del Estado de la Ciudad de Buenos Aires aceptó ayer el ofrecimiento de Mauricio Macri: 26% de aumento en dos etapas con lo que el salario inicial pasaría a ser de 4.200 pesos a mediados de año.
