Saber qué tipo de construcciones hay en el departamento, cuáles están declaradas y de qué materiales están hechas son algunas de las preguntas que se plantean realizar -a través de un censo local y periódico- los concejales de Tunuyán.
Esta iniciativa, que actualmente está en estudio en el ámbito legislativo municipal, busca contar con la información "cierta y actualizada" para desentrañar la problemática de vivienda del territorio tunuyanino y poder planificar hacia dónde y cómo pretende extenderse su centro urbano.
El concejal radical Pablo Ortiz presentó este proyecto, que está inspirado en una propuesta que piensa implementar la ciudad de Mendoza. “Los departamentos carecemos de información precisa sobre el estado actual de las construcciones de la zona y esto se convierte en un fuerte impedimento a la hora de planificar el ordenamiento territorial”, apuntó el edil.
Por ejemplo, Ortiz señaló que el Censo Nacional del 2010 no da cuenta de qué materiales están hechas las viviendas, “lo cual es fundamental para conocer las condiciones de habitabilidad de las mismas”.
Según el concejal, los cruces de información que se manejan a nivel provincial tampoco permiten detectar “si, en la actualidad, hay casas abandonadas, con riesgo sísmico, con problemas estructurales, etc.”.
El proyecto ingresó hace unos días y se espera que hoy tome estado parlamentario, para ser tratado en la Comisión de Obras. Los promotores de la iniciativa aseguran que hay consenso en CD sobre la necesidad de que exista una base de datos cercana y accesible sobre el tema. "Claro que el proyecto es totalmente modificable y puede crecer con nuevos aportes", dijo Ortiz.
Lo cierto es que -según los índices censales- Tunuyán es uno de los departamentos que mayor crecimiento demográfico ha registrado en las últimas décadas. Esta realidad obliga a este municipio, y a todo el Valle de Uco en general, ha plantearse en qué condiciones y bajo qué lineamientos quiere que se produzca su desarrollo urbanístico.
“Este censo también nos permitiría determinar la presencia de construcciones o ampliaciones clandestinas, es decir que no estén registradas en la comuna”, apuntó el edil.
El texto de la normativa sostiene que, una vez aprobada la ordenanza, este relevamiento censal no deberá extenderse por más de 180 días (seis meses), a fin de que sus resultados puedan ser utilizados en el diseño de políticas habitacionales lo antes posible.