ProMendoza, con una mirada interesante

El nuevo titular de ProMendoza ofreció un enfoque atinado al señalar que la Argentina puede recuperar mercados y ganar otros en el orden internacional, si se trabaja en conjunto entre la actividad pública y privada. También reconoció que existen problemas

ProMendoza, con una mirada interesante

ProMendoza es un organismo público-privado que se conformó en su momento a imagen de la gestión que desarrolla ProChile, con la intención de trabajar en forma conjunta entre los sectores a los efectos de abrir los mercados, especialmente para la exportación de los productos locales.

La información que brinda es importante, en razón de que ofrece una mirada amplia sobre cuáles son las posibilidades de los productos en los distintos países, a la vez que brinda información sobre las exigencias que se establecen en el exterior para el ingreso de los productos.

La tarea es interesante, pero si nos atenemos a las declaraciones del actual titular del organismo, las perspectivas se amplían en razón de que ofrece una mirada realista, alejada de actitudes políticas, que incluyen también una velada crítica hacia algunas decisiones de la política económica nacional.

El primer aspecto a considerar se centra en la intención del nuevo titular, Daniel González, de recuperar el mercado brasileño. Se trata de la mirada sobre un país de casi 200 millones de consumidores, con un poder adquisitivo que ha crecido en los últimos años como consecuencia de la ampliación del porcentaje de clase media y que tiene la ventaja de contar con arancel cero para el ingreso de productos mendocinos, como consecuencia de los acuerdos del Mercosur.

Aseguró que Mendoza no aprovechó en su totalidad las bondades que ofrece el mercado brasileño y que el objetivo estuvo muy concentrado en San Pablo.

Hizo alusión a las posibilidades de complementación, como puede suceder con el vino (un sector importante de la industria vitivinícola brasileña quiere trabajar en conjunto con la argentina), aspecto al que debe sumarse el hecho de que Brasil es el principal mercado hacia el cual va dirigida gran parte de la producción local, como el ajo (en los últimos años debió enfrentarse a una fuerte competencia con el ajo chino), zanahorias, peras, cerezas, uvas secas, ciruelas con y sin carozo, aceite de oliva, aceitunas, jaleas y mermeladas y parte de la producción hortícola en fresco. Reforzar ese mercado resulta, entonces, fundamental.

Hizo alusión, también, a ampliar las posibilidades en el mercado chino, objetivo buscado por la gran mayoría de los países productores, y a Estados Unidos, el principal mercado hacia el cual van dirigidos los vinos argentinos. Y a trabajar sobre las posibilidades que ofrecen países latinoamericanos, como Ecuador, México y Venezuela.

Otro aspecto interesante se centra en el hecho de que el titular de ProMendoza reconoce los inconvenientes que plantean para las exportaciones locales algunas decisiones de la política económica nacional. Aseguró en ese marco que "hay que resolver (el tema) de los reintegros, los derechos de exportación, las devoluciones del IVA y el tipo de cambio", a los que calificó de "problemas serios y que afectan mucho", insistiendo entonces que son aspectos que "hay que discutirlos en el corto plazo".

Finalmente, también debe destacarse el mensaje positivo que ofreció, al señalar que las metas no son inalcanzables y que se pueden lograr a través de un trabajo conjunto entre el sector oficial y el privado, a los efectos de fijarse metas y alcanzarlas en el corto y el mediano plazo.

Tal como lo asegura, los recursos -el clima, la tierra, el agua y especialmente el humano- están, sólo falta ponerse trabajar y reclamar, como corresponde y con la celeridad del caso, los cambios que deben producirse en la política económica nacional que están afectando a las economías regionales, no sólo a Mendoza.

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