Productores vitivinícolas vienen desde hace un tiempo alertando sobre la posibilidad de que se dificulte la cosecha de uvas para la producción de vino y aseguraron que el sobre stock de ese producto presiona sobre los precios en "un mercado recesivo".
"La semana que viene arrancamos con la cosecha para las bodegas. Ese mercado está muy deprimido, está muy mal. Estamos en una situación acuciante, porque hay un sobre stock vínico de 330 millones de litros que están sobrando y está pesando en el precio", indicó el presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), Ángel Leotta.
El dirigente advirtió que “a pesar de que la nueva cosecha viene normal (25 millones de quintales), hay una serie de factores que afectan mucho al sector: uno es el sobre stock vínico y otro es que el mercado interno y el consumo vienen cayendo cada vez más, porque el poder adquisitivo y el salario cayó”.
Según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), las ventas en el mercado interno se redujeron 6,3% en 2018 respecto a 2017 hasta los 8.358.345 hectolitros, mientras que el consumo per cápita se redujo en un 7,73% hasta los 27,81 litros, calculados en una población mayor de 20 años.
“De esta industria depende mucha gente, tanto directa como indirectamente. Si no hay soluciones perentorias va a haber un problema social gravísimo en la región. Hoy peligra la realización normal de la cosecha, pueden quedar colgadas las uvas y arruinarse los parrales”, indicó.
A partir de esto, Leotta pidió acciones al respecto al Gobierno nacional, como la quita de retenciones a la exportación para el sector y la vuelta de los reintegros en la misma proporción en la que se encontraban.
“Deberíamos tomar algunas medidas con la parte pública nacional. El año pasado nos disminuyeron los reintegros a las exportaciones, pero a la vez nos pusieron retenciones. Fue un doble castigo. Si no sacamos las retenciones y ponemos de nuevo reintegros al porcentaje en el que estaba antes, no vamos a poder sacar ese sobrestock”, concluyó al respecto.
Por su parte, el presidente de Coninagro, Carlos Iannizzotto, en consonancia con Leotta, sostuvo que "hay muchas posibilidades de que se dificulte la cosecha, porque las tasa de interés es muy costosa, en un contexto donde el precio del producto se encuentra atrasado, con un mercado recesivo. Hoy no nos dan los números".
Además, Iannizzotto, indicó que “hay un sobrestock de vino muy importante. El sector vendiendo todo el vino existente más la cosecha, le quedarán por delante 11 meses para vender todo lo producido. Esto presiona sobre los precios y perjudica muchos a las pequeñas empresas".
Al respecto, el dirigente agropecuario informó que el gobierno provincial mendocino "está proponiendo un fondo de compra para levantar el precio, lo cual estamos analizando".
Durante la semana, productores mendocinos nucleados en la Federación Agraria (FAA) solicitaron al gobierno de dicha provincia que "se realice un operativo de compra de uva".
“Toda la sociedad debe saber que nuestra necesidad no es política. Es de subsistencia: somos miles de familias que estamos atravesando momentos penosos. Hoy trabajamos a pérdida, muy por debajo de los costos de producción, por lo que si no interviene el Estado, el mercado nos sentencia a desaparecer”, indicaron en un comunicado.