Britta Newiger, una joven alemana de 28 años, era una gran fan de la trilogía de Grey y desarrolló, junto a su novio Frederik, una afición al sadomasoquismo semejante a la que establece entre los protagonistas del libro. Ambos seguían los juegos aprendidos entre esas páginas, que terminaron costándole la vida a la chica: en medio de uno de estos rituales de dominación, murió tras recibir hasta 123 golpes de Frederik, según el diario “El Mundo”.
Todo parece indicar que Frederik perdió el control del juego, y que Britta no pudo llegar a pedirle que parara (tal vez porque tenía dificultades para respirar). Desde una Asociación de Sadomasoquistas de Alemania, editaron una serie de páginas para adjuntar al libro en las que explican las diferencias entre la ficción y las situaciones reales de esta práctica sexual.