Hoy se terminará la ronda de ministros por la Legislatura con la presentación de los presupuestos de cuatro carteras. Entre la mañana y la tarde de este lunes pasarán por comisiones de Diputados los titulares de Infraestructura, Rolando Baldasso; de Ambiente, Guillermo Elizalde; de Turismo, Javier Espina, y de Seguridad, Leonardo Comperatore.
La semana se inicia con un oficialismo dispuesto a convocar para mañana un plenario de comisiones de Labor Parlamentaria y de Hacienda y Presupuesto de ambas cámaras con vistas a avanzar en la redacción de despachos de comisión sobre Avalúo, Impositiva e incluso Presupuesto que considera posible “unificar”, es decir de redacción consensuada con la UCR.
En tanto en el radicalismo se prepara un pedido de “regreso” del ministro de Hacienda, Juan Gantús, al cierre del desfile de integrantes del gabinete, lo que sucedería entre esta tarde y mañana.
“Necesitamos que venga Gantús, sí o sí”, afirmó el diputado radical Roberto Infante, con el argumento que su presentación inicial del presupuesto fue anterior al conocimiento del texto de la norma y previa a la presencia de los otros ministros que permitió conocer detalles.
El radicalismo acude a esta semana decisiva en la negociación del paquete fiscal 2015, con su situación partidaria interna definida en materia electoral. El congreso provincial del sábado pasado que consolidó la influencia del intendente Alfredo Cornejo sobre los afiliados radicales a costa de la del diputado nacional Julio Cobos, más allá de las firmas conjuntas.
En tanto en el justicialismo -donde se evalúa que Cornejo “jubiló” a Cobos- remarca que las definiciones que se produjeron en la UCR le permiten tener un interlocutor más definido con lo que se puede prever hasta dónde se podrá avanzar -o no- en acuerdos sobre las tres leyes fiscales.
Desde ya en ambos lados se considera “imposible” un entendimiento en materia de reducción de Ingresos Brutos a la actividad hidrocarburífera. Por lo tanto, todo indica- que el tema se concentrará en un artículo específico de la ley Impositiva que será aprobado o rechazado según sea el número de apoyos y de negativas a la hora de la votación.
Aún se mantiene el interrogante sobre si habrá o no entendimiento en materia de endeudamiento ya que para la UCR el Gobierno está pidiendo “de manera encubierta” un financiamiento por 2.060 millones de pesos: 660 para deuda flotante, 650 para Fondo para la Transformación y Crecimiento y reutilizar 750 del remanente de deuda autorizada el año pasado y que no pudo tomar.
Mientras que el oficialismo insiste en que el presupuesto tiene déficit y endeudamiento “cero” ya que los 660 millones de deuda flotante no implican el ingreso de fondos prestados; los 650 de capitalización del Fondo de Transformación y Crecimiento (Mendoza Fiduciaria y Cuyo Aval) son reembolsables por los beneficiarios de los créditos productivos y el Estado “sólo actúa de garante”, mientras que los 750 millones del remanente del 2014 ya cuentan con autorización de este año.
En este último punto para el PJ no hace falta una nueva autorización legislativa, mientras que para la UCR sí es necesaria “ya que la actual vence a fin de año”.
El primer acercamiento puntual entre las dos bancadas mayoritarias en materia de endeudamiento fue el viernes. Durante el informe del ministro de Trabajo, Justicia y Gobierno, Rodolfo Lafalla se analizó la posibilidad de avanzar “en un endeudamiento en operatoria con proveedores destinado a inversiones de capital”.
El destino específico sería la construcción de una nueva penitenciaría mediante el adelanto de fondos privados a cargo de la empresa constructora. “En este tema puntual no ponemos objeciones para aprobar endeudamiento, en la medida en la que se aclaren el monto y los plazos de devolución”, confirman en la UCR.
Se negocia marcando las diferencias
Aún se hace difícil saber cuánto hay de postura real y cuánto de actuación en la negociación que mantienen el justicialismo y la UCR sobre los proyectos de Avalúo, Impositiva y Presupuesto 2015. No faltan especulaciones sobre acercamientos mayores a los que se exhiben públicamente. Sí es evidente que a ambos les interesa mostrarse “muy diferentes”. El oficialismo como un “negociador” que cuestiona “las negativas sistemáticas” de la UCR.
El radicalismo como "un defensor de las cuentas públicas" frente a un Gobierno "adicto a las deudas".
Por la UCR negocian los legisladores Kerchner, Infante, Palero y Moralejo, con consultas al intendente de Godoy Cruz, Alfredo Cornejo. Por el oficialismo Ciurca, Tanús, Bauzá, Simón y Ramos -además del ministro Gantús- que mantienen informado al gobernador, Francisco Pérez.
Hasta hoy, no existe diálogo ni consultas entre ambos referentes políticos: Pérez y Cornejo. La negociación se ciñe casi exclusivamente a la Legislatura y se espera que sólo allí se alcancen los acuerdos y desacuerdos que recién se terminarán de evidenciar a la hora de las votaciones. Pero tanto el partido de Gobierno como la principal fuerza de oposición miran con igual interés un eventual “acuerdo de transición pacífica” que abarque el primer año de la próxima gestión y que sólo será posible tras acordarse el paquete fiscal.
Para el PD, el déficit es de 2.500 millones
El presidente del PD, Richard Battagion, afirmó que “el déficit del Presupuesto 2015 es de 2.500 millones de pesos” porque “según el proyecto, las necesidades financieras suman 1.525,20 millones, producto de una amortización de deuda por 1.726 millones menos el superávit proyectado de 201 millones”. Pero además, consideró que “no se obtendrá un superávit sino un déficit de 800 millones que sumados a los $ 1.726 de amortizaciones indican una necesidad total de financiamiento de 2.526 millones de pesos”.
En un comunicado de prensa el PD agregó que “la diferencia radica en que, en materia de ingresos de origen nacional el proyecto estima un aumento del 48 por ciento los que no superarán el 42 por ciento”. En materia de regalías petrolíferas “el proyecto considera un aumento del 29 por ciento mientras que -considerando la caída del precio del petróleo y la producción estimada- éstas no superarían el 15 por ciento”.
En cuanto a los egresos de personal “el proyecto prevé un aumento del 20 por ciento en base a una inflación estimada del 15, una ficción total”. Mientras que se prevé financiamiento por 865 millones autorizados anteriormente y una deuda flotante por 660 millones, sincerando el déficit operativo en 1.000 millones más. El gobierno no tendrá más alternativa que seguirse endeudando”, concluye.