Los ñoquis (la palabra deriva del italiano "gnocchi") son pequeñas y sabrosas pastas cuyo origen se remonta al siglo XII.
Los ingredientes tradicionales varían de una región a otra, pero los básicos son papa y harina, que generalmente es de trigo y blanca, aunque también puede ser integral o de maíz, castaña, garbanzo o trigo sarraceno. La papa también puede sustituirse por calabaza o boniato.
DALES SABOR A TUS ÑOQUIS
Pueden llevar espinacas, plantas aromáticas, nuez moscada y otras especias. Algunas recetas tradicionales contienen queso y huevo, pero no son imprescindibles.
Si te gusta el sabor que da el queso, siempre podés añadir levadura nutricional.
ENERGÉTICOS Y NUTRITIVOS
Las papas y la harina aportan energía en forma de hidratos de carbono, además de potasio, que contribuye a regular la tensión arterial, magnesio y vitaminas del grupo B.
Podés combinar los ñoquis con verduras asadas y con seitán o soja texturizada (en una salsa boloñesa vegana).
Es importante que elijas la papa adecuada. Si usas papas nuevas que tienen una proporción mayor de agua, los ñoquis va a quedar pegajosos. Utilizá mejor papas rojas o viejas.
ÑOQUIS CASEROS CON SALSA DE TOMATE
Ingredientes para 4 personas:
- 450 g de papas
- 225 g de harina integral
- ½ cucharadita de sal
- Una pizca de nuez moscada
- Una pizca de pimentón dulce
- 2 cucharadas de perejil fresco picado
Para la salsa:
- 1 kg de tomate triturado
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharada de orégano molido
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta
Preparación:
- Pelá las papas, cortalas en cuartos, cubrilas con agua fría y ponelas al fuego hasta que hierva. Reducí el fuego al mínimo, tapá la olla y cocinalas hasta que estén tiernas.
- Escurrilas y trituralas. Mezclá el puré de papa con la harina, las especias y el perejil.
- Amasá sobre una superficie enharinada hasta que la masa deje de estar pegajosa. Dejá que repose unos 15 minutos.
- Prepará la salsa sofriendo el tomate y los ajos en el aceite.
- Hacé rollos con la masa de los ñoquis algo más gruesos que un dedo y 2 cm de largo.
- En una cazuela con agua hirviendo, colocalos hasta que suban a la superficie. Retiralos con una espumadera.
- Repartí los ñoquis en platos, volcá encima la salsa de tomate y espolvoreá con orégano.
¡Listo para comer!