El dique Chacras de Coria está proyectado sobre el pedemonte, en una de las "ventanitas" situadas entre la cancha del Club Chacras de Coria y la bajada del boliche La Guanaca.
Tomando una de las tantas bifurcaciones que tiene la ruta Panamericana a esa altura, con dirección al oeste está el puesto Rodríguez. Más precisamente es por el camino que va a El Peral y el elegido por centenares de ciclistas de montaña para despuntar el vicio.
Allí, justamente en ese sector, está previsto el trazado del dique Chacras. Las tres familias que viven en ese puesto (todos herederos de Juan Carlos Rodríguez -quien se instaló en el lugar hace más de cien años-) están más que preocupadas por el proyecto y lo evidencian.
"Hace tres meses vimos que había gente haciendo mediciones y salimos a preguntarles qué estaban haciendo y sólo se limitaron a decir que eran del Gobierno, pero no tenían nada que los identifique. Es lo único que se nos ha dicho sobre un posible dique que vayan a construir en el lugar", se sinceró María Fernanda Rodríguez.
En el lugar, una al lado de la otra, se encuentran tres casas humildes (donde viven familias enteras, todas descendientes de Rodríguez) y una precaria granja. "Tenemos 30 caballos, chanchos, una comadreja doméstica y más de cien chivos. ¿A dónde se supone que nos vayamos si nos sacan de acá? Sería bueno que si se está hablando de hacer un dique acá, como mínimo nos consulten y nos informen. Estamos dispuestos a escuchar, pero nunca se nos presentó nadie", siguió la joven.
Desde Hidráulica reconocieron que no descartan la opción de expropiar el terreno en caso de no tener otra alternativa, siempre y cuando los Rodríguez no accedan a retirarse. "Hace más de dos años que nosotros no vamos a la zona y vamos a hacerlo cuando el proyecto esté avanzando y sea algo concreto, no ahora que ni sabemos cuando va a empezar", explicó el director del organismo, Marcelo Toledo.
"Es determinante una situación así. Imaginate si nos vienen a decir de un día para el otro que nos tenemos que ir del lugar donde hemos estado toda la vida y no nos dan otra opción porque nos expropian. Somos tres familias, con ancianos y niños, y los animales. ¿Qué hacemos? No sabemos ni siquiera a quién pedir explicaciones. No sabemos nada. Y un día van a aparecer con máquinas de la nada y van a tirar todo. Estamos preocupados", sentenció Fernanda.
Entre los vecinos que viven en la zona donde está previsto el dique Sosa también hay preocupación y algunas críticas.
"Los proyectos de los dos diques son de antes que estuviese el colector aluvional Escudo, que desvía el agua al Río Mendoza. Ya con esto no se justifica hacer diques cuando en todo el mundo se están haciendo pozos de contención", explicó Sergio De la Torre. Fue justamente la familia de su madre (Pérez Guilhou) quien hizo el loteo en los terrenos ubicados al oeste de ruta Panamericana, a la altura de donde estaría el dique Sosa.
"Hace 20 años vengo siguiendo el tema torrencial y aluvional. Mi madre fue perseguida social y municipalmente por un riesgo que nunca llegó. Es como el calendario Maya y el fin del mundo", ironizó el veterinario.
"Los diques carecen de sentido, se lo discuto a quien sea. Ojalá que los gobernantes abran la cabeza y hagan pozos de contención en lugar de diques", sentenció.
Al respecto, el ingeniero Toledo destacó que se trata de obras aluvionales que toman protagonismo ante catástrofes. Y aseguró: "En las zonas de Potrerillos donde hubo aludes este verano que afectó a gente del lugar también se guiaban por el 'si por acá nunca pasa agua'. Hay que tener conciencia y no instalar casas o basurales en lugares identificados como de riesgo".
