La alfombra roja de la premiación se vio signada por tonos y diseños diversos que suscitaron comentarios a favor y en contra.
Cuatro perfiles diferentes en cuanto a diseño que catapultaron a algunas celebrities, mientras que a otras las enterraron para el olvido.
Julianne Moore, intensidad en rojo: la hermosísima actriz de 54 años enamoró con un diseño de Tom Ford, que proyectó distinción por donde se lo mire, en un rojo sangre perfecto para su tono de piel y cabello. Un escote profundo, pero muy elegante sumaba a su figura sensualidad. Simplemente perfecta.
Hofit Golan, la socialité ahora conocida por su mal gusto. Si no se la tiene muy presente, la presentadora de televisión se ha hecho más popular ahora por la mala elección de su look en la alfombra roja. Con un indescriptible vestido negro con toques obvios y burdos a la hora de intentar ser sensual, se llevó las peores críticas ¿El detalle extra? Una estrella totalmente fuera de lugar.
Amy Adams, elegancia clásica: la actriz lució en su piel nacarada un diseño Lanvin en blanco, que Alber Elbaz le hizo a la medida. De línea recta el vestido de Amy sumó pequeñas piezas de pedrería en el cinturón, y una breve cola de arrastre. Muy distinguida.
Romola Garai con un color- block perjudicial. El largo del vestido de la actriz, pergeñado por Roksanda Ilincic, no estuvo a tono para la gran gala nocturna de los BAFTA. Un look desacertado por donde se lo mire.
