"Te sentís un microbio". Con estas palabras, una mujer de San Luis definió la pesadilla que vive por su ex pareja, a quien denunció por maltratos y acosos constantes. Incluso, el hombre la hostigó con videos íntimos de la víctima, que llegaron al hijo de 9 años a través de Facebook.
Gabriela Fernández Aberastain es profesora de fitness. En diciembre pasado, la mujer se consagró en la categoría Wellness Senior de Fitness, en una muestra de su resiliencia y de su fortalecimiento físico y espiritual. Sin embargo, la violencia volvió a su vida.
La víctima denunció el pasado 13 de abril que su ex pareja, de iniciales D.O., la sometió durante los tres años que ambos estuvieron juntos. Si bien la relación culminó, en febrero pasado, comenzó a recibir amenazas de la ex de este hombre, quien cree que todavía cree que Gabriel sale con el acusado.
Según lo informado por El Diario de la República, Gabriela presume que la mujer la hostiga con la complicidad o manipulación de su ex novio. Como si fuera poco, los denunciados filtraron y divulgaron un video donde Gabriela está desnuda. Por medio de las redes sociales, el material llegó al hijo de 9 años de la profesora de fitness.
El lunes pasado, y por orden del juez Juan Manuel Montiveros Chada, los domicilios del ex de Gabriela y de la otra mujer fueron allanados. En la casa del hombre, los investigadores secuestraron un celular y una tablet; mientras que en la de la ex, computadoras de escritorio y notebooks.
"Me escribía, me preguntaba 'decime si estás con él' y yo le explicaba que no. Incluso le mandé unas fotos mías golpeada y le ponía 'mire lo que he pasado con ese hombre. Tiene un montón de denuncias. Si le muestra algo conmigo, es viejo'. Pero no, me insultaba", contó la víctima, quien destacó que la agresora le dijo que sus dos hijos, de 4 y 9 años, iban a tener un accidente si salían a la calle.
Algunos padres de los compañeros de los hijos de Gabriela han manifestado que no quieren que ellos cursen en la misma escuela porque "el video de la madre podría ser una mala influencia".
"Yo era la imagen de una marca de proteína y ahora me suspendieron el contrato", lamentó Gabriela, quien hasta llegó a considerar mudarse de provincia. Otras mujeres se contactaron con ella y también aseguraron que pasaron por lo mismo.
"Nunca pensé que se iba a viralizar de la forma que se viralizó en un día, dos. Es desesperante porque no podés hacer nada ni decir nada. Te tenés que esconder como si hubieras cometido un delito y yo no cometí ningún delito", relató la mujer en La Gaceta de San Luis.
"No podemos normalizar que tener un video o una foto íntima de alguien se convierta en un arma para destrozar. Si una persona puso un voto de confianza en vos y te dio algo que es íntimo por lo que sea, porque te quiere, porque le gustás, pero te eligió a vos. No tenés porqué viralizarlo, es su intimidad", expresó la víctima.