Una investigación por pornografía infantil que comenzó en Alemania tuvo su rebote en una casa de San José, Guaymallén, donde vive un hombre que por estas horas es investigado para saber si consumía y vendía material pornográfico con menores como protagonistas. El sospechoso por el momento está en libertad ya que el delito por el que es investigado es excarcelable.
La detención se produjo en el marco de la llamada "Operación Runa" que comenzó en Alemania. Hace tiempo Interpol inició una investigación que determinó que en varias provincias de Argentina se traficaba pornografía infantil.
Así fue como ayer se realizaron 35 allanamientos simultáneos en distintas provincias del país para dar con los sujetos sospechosos. La orden fue emitida por el Juzgado de Primera Instancia Penal y Contravencional de la Ciudad de Buenos Aires.
En Mendoza se allanó una casa de Correa Saá al 600, en San José donde vive un matrimonio con su hijo pequeño y un hermano del dueño de casa. El buscado era este último, un sujeto de 30 años que trabaja como custodio de una empresa privada.
En el operativo intervino Delitos contra la Integridad Sexual, de la división de Delitos Tecnológicos y Policía Federal.
"Hemos secuestrado una computadora, celulares, tarjetas de memoria y otros dispositivos de almacenamiento de material informático", explicó a Los Andes el principal Luis Quevedo, jefe de Delitos Sexuales de la Policía de Mendoza.
El sospechoso fue llevado a una sede policial pero luego quedó en libertad. De hecho, no estuvo en calidad de detenido sino que se lo identificó y se verificó si tenía antecedentes. "No podemos creer lo que está pasando. Nos arruinó la vida", dijeron familiares del sujeto.
El delito
Según el artículo 128 del Código Penal Argentino, "será reprimido con prisión de seis meses a cuatro años el que produjere, financiare, ofreciere, comerciare, publicare, facilitare, divulgare o distribuyere, por cualquier medio, toda representación de un menor de 18 años dedicado a actividades sexuales explícitas o toda representación de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales..."
Y agrega: "Será reprimido con prisión de cuatro meses a dos años el que tuviere en su poder representaciones de las descriptas en el párrafo anterior con fines inequívocos de distribución o comercialización". Ambos delitos son excarcelables.
Operación Runa
Los procedimientos en el país contaron con la colaboración de la División Delitos Cibernéticos contra la Niñez y la Adolescencia de la Policía Federal.
La investigación se originó en la Oficina Federal de Investigación Criminal de Alemania (Bundeskriminalamt) que detectó, al efectuar búsquedas de archivos de pornografía infantil en la red eDonkey 2000, clientes que ofrecían copias de archivos de video de contenido pornográfico infantil en la red mencionada.
Se identificó el link ed2k de los archivos en cuestión y a través de la red se verificaron las IP involucradas en los distintos incidentes de tráfico, lo que permitió establecer qué cliente y en qué domicilio se habrían almacenado las imágenes pornográficas.