Por un toque de jerarquía

Boca le ganó a Godoy Cruz con un par de apariciones de sus jugadores más consagrados. El Tomba terminó sin técnico en el banco.

Por un toque de jerarquía

Jerarquía. Mayor peso individual. Toque de distinción. Títulos para explicar la derrota de Godoy Cruz en la Bombonera. Llámelo como quiera.

¿Por qué? Es fácil descifrarlo. Boca tiene un equipo de grandes futbolistas que marcan la diferencia aún en situaciones de riego,y el Expreso es un elenco joven-de los 11 titulares sólo tres habían jugado antes en cancha del Xeneize en Primera División-. Y eso se notó a la hora de inclinar la balanza. Sino hay que mirar el centro-asistencia de Tévez para la cabeza de Meli.

Fue un partido que no mostró una gran superioridad de Boca, pero sí que controló en el segundo tiempo.

Antes de la apertura del marcador, en la otra área, Burgos había contado con su oportunidad,  sin oposición, y erró el cabezazo con el arco libre. Después fue el momento de Gastón Giménez, que hizo todo bien, pero la cabeza del “Cata” Díaz dejó otra vez a los jugadores tombinos con gusto a nada y sabiendo que esas chances no se pueden desperdiciar ante equipos como Boca.

Cosas como estas son las que terminan por dejarlo con las manos vacías al Bodeguero.

Nadie podrá reprocharle al conjunto de Gabriel Heinze que salió a jugar con personalidad y actitud, siendo inteligente a la hora de recuperar y atacar. Pero falló en tramo clave del desarrollo, el más importante, cuando debió meter la pelotita en el arco rival. Sí. Desaprovechó sus chances. Únicas. Y que muy pocos equipos tienen en campo de Boca ante situaciones tremendamente favorables e irrepetibles.

Luego se entregó al control de Boca, sin poder rebelarse ante el marcador y la poca convicción de Boca para liquidar el partido.

Las bandas, el negocio tombino

Estaba claro que el negocio para Godoy Cruz  estaba por las bandas, y no se equivocó porque cuando Fabrizio Angileri fue cara a a cara con Gino Peruzzi, el lateral le miró al chapa al pibe Bodeguero y cuando cambió se punta también hizo alguna diferencia. Garro, con menor intensidad por el otro lado, generó la preocupación de Colazo a sus espaldas.

Pero claro, con eso no alcanza para derrumbar al Boca de las figuras y líder y dar el batacazo. Se necesita más, ese plus que dan los hombres de peso y recorrido en la máxima categoría. Y hoy el Tomba los está moldeando, de a poco, les va dando rodaje y eso lleva tiempo.

Por eso uno es puntero con la historia sobre sus espaldas, y el otro está buscando su identidad futbolística y le cuesta hacer pie en el campeonato.

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