Varios mitos giran en torno a la celebración de Santa Rosa, pero el más conocido es el que indica que hay que cortarse el pelo en esta época. Según la creencia hay que cortarse el pelo y enterrar el mechón bajo la tierra, o bajo un rosal para que crezca fuerte sano.
Según cuenta la historia, Isabel Flores de Oliva, la primera Santa de América, fue luego llamada Rosa por su increíble belleza.
Aunque era asediada desde temprana edad por muchos pretendientes, la joven siempre fue fiel a su vocación por Dios. Esta devoción y entrega provocó que la joven maltratase su piel frotándose pimienta e incluso hasta arruinó su rostro y cortó su cabello para ocultar su hermosura.
Así nació esta creencia que sostiene que hay cortarse el pelo el día 30 de agosto ayuda a que éste crezca sano y fuerte.