Un museo australiano devolverá un retrato cuya autoría se llegó a atribuir a Vincent Van Gogh a sus propietarios legales en lo que se considera como la primera restitución por el país, de arte perdido bajo el régimen nazi.
La National Gallery de Victoria (NGV) informó que considera que “Cabeza de hombre” fue parte de una venta forzada del judío alemán Richard Semmel en 1933 y debería devolverse a sus herederos.
"Tenemos entendido que es el primer caso de este tipo en Australia", dijo en el museo en un comunicado colgado en internet esta semana.
Según el Comité de Restituciones holandés que analizó las demandas, Richard Semmel tuvo que vender su colección para poder escapar a la persecución nazi de los judíos, según la pinacoteca.
Cuando el museo de Melbourne compró la pintura en 1940, ésta había cambiado varias veces de manos y se pensó que era de Van Gogh.
Tras las dudas suscitadas entre los expertos, en 2006, el museo Van Gogh Museum de Amsterdam concluyó que el trabajo no era del famoso artista sino que quizá pertenezca a alguien que trabajó en la misma época que Van Gogh.
"La atribución de la obra no ha influido en la decisión de la NGV de devolverlo", dijo el museo, que lo considera un asunto "moral".
La galería espera la respuesta de los herederos de Semmel, que estarían viviendo en Sudáfrica.