El conjunto de Eduardo Strugo no pudo ante Autolavado El Tiburón y cayó por penales por 2 a 1, tras empatar en tres goles. Arrancó complicada la tarde-noche para el equipo que dirige Eduardo Strugo.
Es que después de un momento de estudio entre ambos fue el equipo de Comodoro Rivadavia el que pegó. Matías Cárcamo marcó la primera diferencia para la visita en el comienzo de un partido complicado para los mendocinos.
El golpe fue duro. Tanto que un minuto más tarde Martín Subiabre asestó un nuevo revés al equipo de Eduardo Strugo.
De ahí en más el Burrero intentó por todos los medios descontar antes de irse al descanso, pero no pudo. De esta manera los comodorenses se fueron al descanso ganando por dos goles.
Tuvo que trabajar y mucho Jockey en la segunda parte. Tuvieron que pasar nueve minutos para que el conjunto de Villa Hipódromo pudiera descontar en el score. fue Martín Cusa el encargado de emparejar el tanteador.
Es que el mendocino, con diferencia de un minuto, empató el partido para llevar alivio a los presentes en el estadio maipucino.
Sin embargo el desarrollo iba a poner nuevamente en aprietos al Burrero. Es que cuando el reloj marcaba 15 minutos, Matías Carrizo marcó para la visita que volvió adueñarse del tanteador.
Parecía que Autolavado El Tiburón se llevaba la victoria y el pase a la gran final pero, cuando casi no quedaba tiempo, apareció Tomás Pinea para empatar el encuentro y darle paso al alargue, cuando persistió la paridad y todo debía dirimirse en los penales. El conjunto comodorense fue más efectivo y terminó quedándose con la llave.