Un hecho insólito tuvo lugar en Tailandia cuando el primer ministro tailandés, Prayuth Chan-ocha, interrumpió su propia conferencia de prensa para rociar con desinfectante de manos a un grupo de periodistas en un intento por evitar cuestionamientos en torno a una posible reforma del Gabinete. El video se viralizó rápidamente en las redes sociales.
El gobernante de 66 años se sintió frustrado cuando se le preguntó sobre una lista de posibles candidatos para puestos vacantes en la administración, luego del encarcelamiento la semana pasada de tres de sus ministros por insurrección durante las protestas de hace siete años.
En la sesión informativa en vivo, Prayuth abandonó su lugar, tomó una pequeña botella de desinfectante, se acercó a los periodistas y roció a cada uno de ellos mientras sostenía un cubrebocas frente a su boca.
Prayuth Chan-ocha, quien llegó al poder tras un golpe de Estado en 2014, es un ex líder militar golpista conocido por sus comentarios casuales y cómicos a los medios. Sin embargo, a menudo arremete contra los reporteros.
El momento que se volvió viral
Más tarde fue filmado hablando con el mismo grupo de periodistas y luciendo cada vez más molesto, hablando inaudiblemente mientras los rocía con amplios movimientos de su mano antes de alejarse nuevamente.
Tras lo sucedido, Prayuth ha indicado que “tiene miedo del coronavirus” y que, como tal, “debe protegerse”.
En sus últimos encuentros con la prensa, el primer ministro ha hecho uso de un lenguaje vulgar y ha llegado a tirar una cáscara de plátano a un camarógrafo. También ha amenazado con hacer uso de la ley marcial una vez los periodistas trataron de informar del incidente.