Un pingüino se salvó de ser comido por un grupo de ballenas orcas gracias a que tuvo la ingeniosa idea de saltar a un bote de turistas que navegaban en las gélidas aguas del estrecho de Gerlache, en la Antártida. La secuencia quedó filmada por los viajeros y uno de ellos la compartió en las redes, donde rápidamente se hizo viral.
La hazaña la realizó un pingüino Papúa, científicamente conocido como Pygoscelis Papua, que estaba siendo perseguido por un grupo de ballenas orcas, que a diferencia de las otras ballenas, se alimentan de carne. Pero el ave fue más inteligente y logró refugiarse dentro de un bote de turistas, saltando dentro de él.
Los turistas navegaban en diferentes botes y su objetivo era además de conocer la zona, fotografiar y observar la fauna que existe entre los icebergs en el estrecho de Gerlache, en la Antártida. Y estaban atentos observando a las orcas para ver cómo se desempeñan en su habitad.
Y sí que lo consiguieron, porque mientras las admiraban pudieron ser testigos de una escena de depredación cuando en grupos seguían a un solo pingüino para cazarlo. Pero lo que no esperaban los espectadores es que animal escogiera uno de sus botes como refugio para salvar su vida.
Según informó La Vanguardia, el bloguero Matt Karsten, estaba a bordo del bote que estaba al lado del que eligió el ave para saltar. Sin embargo, capturó toda la escena y las compartió en sus redes. En las imágenes se puede ver las orcas persiguiendo al pingüino que de vez en cuando salta por encima del agua para alejarse de sus depredadores.
“Fue como ver un episodio de National Geographic en directo”, detalló Matt Karsten a The Daily Mail. “Me imagino que el pingüino se sintió muy aliviado de escapar”, puntualizó.
Pero las orcas siguieron el bote sabiendo que su plato viajaba en él, aunque luego de un rato se dieron por vencidas y se alejaron. Tras comprobar que la zona estaba despejada, el pingüino decidió volver al agua orgulloso de haber podido sobrevivir.
“Las orcas siguieron al bote durante un rato y finalmente se rindieron con el pingüino. Después de navegar durante unos minutos, el pingüino se despidió del bote y saltó de nuevo al agua helada”, finalizó Karsten