Una enorme nube con la forma de Cristo Redentor tuvo lugar en el cielo de Yucatán, México, y llamó fuertemente la atención luego de haber sido compartida en las redes, donde por una lado, decenas de usuarios se sorprendieron por el parecido, mientras que por el otro, varios comenzaron a tejer teorías místicas.
La fotografía fue tomada durante un atardecer en el estado de Yucatán y en la misma se aprecia una nube con la forma de una persona, la cual es prácticamente igual a la del famoso Cristo Redentor ubicado en Río de Janeiro, Brasil.
Erick Pech fue el hombre que tomó la imagen y la compartió en las redes generando una ola de comentarios con diferentes reacciones y hasta aseguró que no se trata de un fotomontaje, ya que algunos lo acusaron de estar mintiendo.
“Soy fanático de los atardeceres y cada que veo la posibilidad de sacar una buena toma hago todo lo posible para hacerla. Así que les comparto esta belleza. No sé si se trata de alguna señal, pero la toma habla por sí sola”, aseguró el usuario.
Señal divina
Entre tantas reacciones y comentarios hubo un grupo de personas que comenzó a hacer teorías místicas asegurando que se trataba de “una señal” divina, la cual dice que “Cristo viene pronto”.
Según detalló el fotógrafo, la escena ocurrió en Yaxcabá, Yucatán, en punto de las 19:58 horas y aunque la mayoría asemejó la forma de la nube con la escultura de Rio de Janeiro, otros han dicho que se trata de Jesucristo en el Cerro del Cubilete en Guanajuato.
Sin embargo, debido a la viralidad de su imagen, Erick Pech agradeció a todas las personas que compartieron su fotografía reiterando que no la había alterado y que incluso un experto ya había dado fe que no estaba manipulada.
Finalmente, a quienes apuntaron a que se trataba de un tipo de manifestación religiosa, Pech se defendió diciendo que más bien se trata de una pareidolia, es decir un fenómeno donde un estímulo vago y aleatorio, habitualmente una imagen, es percibido erróneamente como una forma reconocible.
Como ya se sabe, no es la primera vez que personas suelen creer que una sombra o marca formada por casualidad es una señal divina, muchas veces se han tomado formas de humedad en las paredes, o manchas a las cuales, en muchos casos, hasta le llevan flores o prenden velas en el lugar para agradecer la aparición.