Danel Leiva no se olvidará jamás de la traumática siembra de porotos que protagonizó. El productor de 37 años es oriundo de Colonia Alpina, en el sur de Santiago del Estero, y terminó volviéndose viral por una noticia un tanto traumática.
Mientras preparaba todos los implementos y materiales para concretar una plantación de legumbres se llevó un enorme susto este lunes, cuando abrió una de las bolsas con las semillas de poroto. Además de dichas semillas, un ser vivo de más de 2 metros de largo lo esperaba en el interior de la bolsa.
En diálogo con diario La Nación, Levia manifestó que: “Esta mañana encontré una lampalagua en el poroto mungo. Estamos sembrando este poroto arriba de girasoles, estábamos revisando la semilla y nos encontramos con esto”. Además, dijo que las serpientes, normalmente, se encuentran en los galpones por las palomas y las ratas.
Es que en el embalaje había una enorme serpiente lampalagua oculta entre el material para la tierra. “Hay gente que adopta a estos animales; las dejan enroscadas en los galpones”, indicó.
Las imágenes se viralizaron a través de Twitter, donde Leiva compartió la tenebrosa fotografía. En ella se visualiza a la serpiente, cuyo nombre científico es Boa constrictora, mientras reposa sobre los granos verdes. “Pensé que la semilla de poroto podía tener gorgojos...”, contó en la red social.
Daniel señaló que cerca de la zona en donde vive, cerca de la laguna de Mar Chiquita, pueblo cordobés de Miramar, es habitual encontrarse con este tipo de reptiles.
“Son regiones donde hay monte y en esos lugares suelen aparecer estas serpientes”, afirmó. Además, contó el destino que tuvo la serpiente: “La dejamos ahí sobre la semilla, pero lo más probable es que se vaya sola, a lugares muy resguardados, porque allí está muy expuesta, con movimiento”, dijo.
“Es usual que busquen los calores en las monotolvas o los tractores cuando los parás, pero si te pica una lampalagua no tiene veneno, mata a las presas por compresión, es distinta a la yarará”, informó.
Varios usuarios comentaron la publicación y dieron sus opiniones sobre el animal. “Sí, es una lampalagua. Son re mansas. Claro no te pongas a molestarla porque muerde. Son constrictoras sin veneno. En el campo controlan los ratones y lauchas. En Salta, algunos puesteros las tienen cerca de los ranchos para control de roedores”, comentó una persona.
En el caso de las yararás, explicó, estas suelen dar picaduras que llevan a la inflamación, una necrosis parcial o, en el peor de los casos, a la muerte. Sin embargo, hay situaciones en donde las picaduras se inflaman, pero que se recuperan tratándolas con rapidez.
“Hay gente que ha sido mordida y que las encuentra en silobolsas”, expresó.
Leiva también tiene una empresa de tecnología para el agro: GEOAgro by Tek, con la que hace asesoramiento en agricultura de precisión. “Tenemos un equipo de implementación que acompaña a habilidades blandas en el desarrollo de las empresas, que tiene tecnología de punta, porque a veces compran tecnología y nosotros ponemos en valor todo eso. Tratamos de jerarquizar a todas las empresas”, dijo. Asimismo, tiene una empresa donde producen leche en un tambo y cultivan girasol, maíz, soja, garbanzo y poroto.
