Si querés hacer un postre refrescante, fácil de preparar y delicioso, la tarta de frutilla con gelatina es ideal para vos.
Este clásico es perfecto para cualquier ocasión y, lo mejor, podés hacerlo rápidamente. Con su base crocante de galletas y la suavidad de la gelatina con frutillas, seguro va a ser un éxito.
Ingredientes
- 200 g de galletas tipo María o Digestive
- 100 g de manteca derretida
- 500 g de frutillas frescas (lavadas y cortadas en rodajas)
- 1 paquete de gelatina de frutilla (para 500 ml de líquido)
- 250 ml de agua caliente
- 250 ml de agua fría
Preparación paso a paso de la tarta de frutilla con gelatina
1. Preparar la base de galletas: Lo primero que vas a hacer es triturar las galletas hasta que queden bien finitas. Usá un procesador de alimentos o meté las galletas en una bolsa de plástico y aplastalas con un palo de amasar. Luego, mezclalas con la manteca derretida hasta que se forme una masa homogénea.
2. Formar la base de la tarta: Colocá la mezcla de galletas en un molde desmontable (si no tenés uno, podés usar uno común pero asegurate de enharinarlo para que no se quede pegado). Presioná bien para que quede compacto. Luego, poné el molde en el refrigerador mientras preparás el resto de los ingredientes.
3. Preparar las frutillas: Cortá las frutillas en rodajas finas y distribuilas sobre la base de galletas. Asegurate de que estén bien repartidas para que cada porción tenga la misma cantidad de frutillas.
4. Hacer la gelatina: Disolvé el paquete de gelatina de frutilla en 250 ml de agua caliente, revolviendo hasta que se disuelva por completo. Luego, añadí los 250 ml de agua fría y mezclá bien.
5. Verter la gelatina sobre las frutillas: Con cuidado, volcá la gelatina líquida sobre las frutillas, asegurándote de que las cubra bien. La gelatina tomará forma al enfriarse, creando una capa suave sobre las frutillas.
6. Enfriar la tarta: Colocá la tarta en el refrigerador y dejala reposar por al menos 2 horas, hasta que la gelatina esté completamente cuajada. Este paso es esencial para que la gelatina tome la textura correcta.
7. Desmoldar y servir: Cuando la gelatina esté firme, desmoldá la tarta con cuidado. Colócala en un plato grande y, si querés, podés decorarla con más frutillas frescas o un toque de crema chantilly.
