Kursat Yildirim es un hombre de suerte. Actualmente reside en Dortmund, Alemania, y tiene 41 años. En septiembre del 2022 ganó 10 millones de euros y a tan solo seis meses volvió a ganar un premio de 2.684,80 euros. Además, afirmó que no era lo suficientemente feliz porque no tenía una novia con quien compartir el increíble premio, según informó TN.
Debido a la gran cantidad de dinero, Kursat se volvió millonario y en esta oportunidad decidió donar el premio, aunque todavía no se dio a conocer a quien.
El 24 de septiembre, ganó la lotería y sus 9.927.511 de euros hicieron que muchas personas se interesaran por él. Yildirim aprovechó una entrevista que tuvo con el diario Bild para difundir un pedido que llamó la atención: “Por favor, señale en su historia que todavía estoy soltero. Puede ser rubia o morena, no me importa, solo quiero enamorarme”, expresó.
El alemán es hijo de inmigrantes turcos y llegó al país cuando tenía 12 años. Primero trabajó en una fábrica de acero antes de que la suerte se pusiera de su lado, pero sus sueños no cambiaron. Kursat busca una mujer “a la que le encante viajar y que esté lista para formar una familia” y lo primordial es que tenga un buen corazón: “Necesito una mujer en la que pueda confiar sin importar lo que pase”, remarcó en la entrevista.
Sin dudas, el hombre ha disfrutado su dinero, se compró un reloj de lujo, un Ferrari de 376.000 euros y un Porsche de más de 249.000 euros solo con la intención de molestar a “los envidiosos”. También, se convirtió en el dueño de su bar favorito.
El hombre de la suerte, contó que compartió su premio con la familia. “Lo mejor de esto es que puedes hacer feliz a tanta gente. Inmediatamente, transferí dinero a mis padres y mis hermanos”, aseguró.
El hombre, presuntamente tiene antecedentes de alcoholismo y violencia física pero aun así intenta enmendar sus errores. “Siempre fui el inadaptado de mi familia”, admitió.
A Kursat Yildrim ahora todos lo buscan para pedirle ayuda debido a la cantidad de dinero que posee. Pese a esto, no dejará que el dinero cambie su mentalidad: “Nunca olvidaré de dónde vengo. Soy de la clase trabajadora, nunca me volveré arrogante”, garantizó.