Se hacía pasar por médica, por abogada y hasta celebridad cultural. Carolina Leiva es conocida como la “Scarlett Johansson chilena”, una famosa estafadora que ahora está libre y cuya historia podría llegar a Netflix. Hace años es una cara recurrente en los medios de Chile por, básicamente, burlar el sistema bancario.
Leiva engañó a tres bancos y seis personas por un total de 3 mil millones de pesos chilenos. En 2018, la delincuente fue detenida por personal de Carabineros en la comuna de Estación Central. En su poder se encontraron más de cuatro millones de pesos chilenos en efectivo, además de lentes de sol de marca Versace, un reloj Chanel, una billetera Carolina Herrera y una cartuchera Louis Vuitton. Siempre la mujer se ha declarado fanática del lujo.
También ha contado que tuvo “una obsesión con el tema de la imagen muy fuerte (...) El rostro, la cara es la misma de siempre. Son mis ojos, mi nariz, todo, yo no me he operado la cara. Pero sí me inyecté botox y vitaminas”.
Hace algunos días, la célebre ladrona salió de la cárcel de San Joaquín después de ser condenada por los delitos de falsificación y uso malicioso de documentos públicos y estafa.
Para su accionar, la “Scarlett Johansson chilena” usó documentos falsos como escrituras, liquidaciones de sueldos de hasta 14 millones de pesos chilenos, adjudicaciones de licitaciones y supuestos depósitos a plazo, para obtener créditos millonarios. Los tres bancos que le entregaron el dinero fueron Internacional, Estado y Santander.
En diálogo con el matinal “Contigo en la mañana” (Chilevisión), la mujer chilena contó que productores de Netflix está interesados en trasladar su historia a una producción audiovisual.
“Sí, es verdad. Yo lo que esperaba, cuando estuve detenida, es poder revisar el guion”, aseguró Carolina Leiva, agregando que, además, estando privada de libertad no podría recibir remuneración.
El conductor del magazine televisivo le consultó a la “Scarlett Johansson chilena” qué le parecía hacerse famosa y ahora contar con la posibilidad de una serie por ser una estafadora.
“Me da vuelta. La responsabilidad que tú tienes en el fondo. Porque va a ser algo que va a ver la gente, entonces no quiero que ninguna niñita se vea reflejada en mí tampoco”, reflexionó Leiva.