Shakira se ha consagrado con el paso del tiempo y a menudo da razones para reafirmar que nunca hay que darla por retirada. Desde que la colombiana lanzó la “Bizarrap Music Sessions Vol. 53″ no dejó de acaparar la atención de millones de fanáticos, dado que la letra está dedicada a su ex Gerard Piqué y su actual pareja, Clara Chía.
Si bien el tema rápidamente se convirtió en un éxito y se viralizó, la fiebre aún no se ha calmado, algo de lo que se ha encargado la propia artista, a través de los videos, desafíos en redes sociales o por el propio merchandising de la canción, en el que se puede encontrar una prenda particular, que fue bautizada como “el buzo de la venganza” y tiene como ideóloga a su sobrina Isabella Mebarak.
Se trata de una pieza de color blanco y con el famoso lema del tema ”Las mujeres ya no lloran, las mujeres facturan” que puede adquirirse en tienda online por unos 60 euros y que ha lucido Shakira en varias ocasiones como un dardo más hacía el exjugador del seleccionado español.
“¡Sudadera edición limitada diseñada por mi sobrina!”, anunció, en sus historias de Instagram la propia Shakira.
Su sobrina es Isabella Mebarak, toda una estrella en TikTok con más de 14 mil seguidores por sus originales videos y creaciones artísticas, incluida la moda. A los 24 años, es una joven diseñadora que ha buscado hacerse con un lugar en el mundo de la moda por su cuenta.
Al igual que Shakira, Isabella presenta un look muy versátil, dejando claro que no le tiene miedo a los cambios y a la mutación de su imagen. Su estilo está considerado excéntrico y creativo. Es una apasionada del Y2K de la década de los 2000 y se considera una diseñadora que no tiene miedo a experimentar con looks distintos.
Sin lugar a dudas, la familia Mebarak es cuna de grandes talentos artísticos. Recordemos que William Mebarak, padre de Shakira, se desenvolvió como escritor y periodista, aunque también trabajo como locutor de radio y hasta joyero. Por otra parte, la artista colombiana heredó el don de la música, componiendo, cuando apenas tenía ocho años, su primera canción para después colocarse entre las cantantes latinas más reconocidas del mundo. El que está más cerca de la intérprete es su hermano Tonino, su road manager y que forma parte del equipo profesional de la cantante, ocupándose de muchos de sus asuntos.